Llueve sobre mojado. El Mallorca no sabe ganar fuera, aunque lo haya hecho dos veces esta temporada, en el Wanda Metropolitano ante el Rayo Majadahonda, y en el campo del desaparecido Reus. El equipo de Vicente Moreno volvió a desperdiciar el viernes en el Heliodoro Rodríguez López una oportunidad única para sumar lo que hubiera sido su tercera victoria de la temporada a domicilio. Como en Zaragoza, el equipo tiró por la borda dos goles de ventaja, con los que llegó al minuto 71, cuando Racic acortó distancias. A partir de ese momento, le entró el miedo al grupo de Moreno ante un Tenerife que supo acorralar a los rojillos en su área. Hasta que tuvo el merecido premio del gol, en el minuto 92, en el segundo de los cinco que añadió el riojano Ocón Arráiz. Fue Tyronne, que hacía ocho minutos que estaba en el campo, el que empató para el Tenerife y frustró, una vez más, las aspiraciones del Mallorca.
Con este empate que sabe a derrota, el Mallorca ha pasado a colocarse a tres puntos de la ansiada sexta plaza, por la que ya sin disimulo se aspira. Con la victoria se hubiera puesto a un solo punto, con los dos próximos partidos en Son Moix, ante el Elche y el Oviedo, en el horizonte.
En el equipo se intenta aparentar normalidad. Molestos -triste, dijo Moreno en la rueda de prensa, pero no conforme- por dejar escapar la victoria en el último suspiro, hay quien le busca la lectura positiva. Se quiere hacer bueno el punto ganando los dos próximos partidos en Palma, donde el equipo ha sumado la friolera de 26 puntos.
Es la cara B, o en este caso la A, de un Mallorca muy diferente cuando juega fuera o en casa. El equipo baja ostensiblemente su rendimiento en los desplazamientos. Le cuesta marcar, y cuando lo hace también encaja. Así es muy difícil. Y lo peor es que nadie es capaz de ofrecer una explicación mínimamente razonable sobre las causas del bajo rendimiento cuando se abandona la isla. Ni siquiera Moreno. Tampoco Lago Junior.
En Elche desperdició el Mallorca su primera gran oportunidad de regresar con los tres puntos. El gol de Abdón en el minuto 37 fue igualado por Sory Kaba, traspasado en este mercado de invierno. La Romareda fue el primer capítulo de lo que sucedió el viernes en Tenerife. Dos goles de Lago pusieron en ventaja al Mallorca en el minuto 20. Pero en la segunda parte al equipo le entró vértigo y los locales empataron en ocho minutos.
En Cádiz también se dejó escapar una oportunidad única. Stoichkov adelantó a los rojillos en el minuto 36. Un minuto después no se le podía poner más de cara el partido al Mallorca ya que el local Jairo fue expulsado. Pues ni así. Con toda la segunda parte en inferioridad, el equipo de Álvaro Cervera fue capaz de igualar a falta de cinco minutos por medio de Garrido. Un mal que parece no tener fin.
Por otro lado, una aficionada del Tenerife de 73 años falleció durante el partido del viernes. El Mallorca envió sus condolencias al club chicharrero.
CONTENIDO_RELACIONADO
- Vea los goles del Tenerife - Mallorca
FIN_CONTENIDO_RELACIONADO
