El Real Mallorca de Miquel Soler se estrena esta tarde en el Nuevo Colombino para medir su crisis con la del Recreativo, un rival que también presenta entrenador y que solo ha sido capaz de sumar dos de los últimos 33 puntos en juego. Muchas urgencias para dos rivales que se la juegan: los baleares, meterse de lleno en la pelea por la permanencia; los onubenses, quedar descolgados.
El choque supone la primera oportunidad para evaluar el efecto que ha tenido en el Mallorca el relevo en el banquillo. Deberían verse "dos o tres cosas diferentes" con respecto al equipo de Valeri Karpin, declaró Soler el jueves.
El técnico catalán quiere un equipo con más posesión y mayor protagonismo durante los noventa minutos. Esa es la teoría, habrá que ver si estos días de entrenamientos han sido suficientes para llevarla a la práctica.
Soler insinuó algunos cambios. Previsiblemente apostará por un 4-2-3-1 en el que Javi Ros oficiará de director de orquesta. Y Marco Asensio se dejará caer por la banda. Puede que no de inicio, pero el preparador bermellón criticó que últimamente el canterano se ha hecho "previsible" y pretende corregirlo moviéndole durante los encuentros entre la mediapunta y alguna de las dos orillas.
Protagonismo de Ros
En la ´era Soler´ ganarán protagonismo algunos futbolistas como el citado Ros; otros, como Kasim, deberán empezar de cero. El ghanés ha bajado considerablemente su rendimiento y el técnico apostará previsiblemente por Agus y Truyols en el centro de la defensa.
De nuevo el Mallorca tendrá que afrontar el choque con la muy sensible baja de Pedro Bigas, que sigue recuperándose de una lesión muscular. También siguen a la espera del alta Cendrós, Fofo y Martí. Marko Scepovic no viajó ayer a Huelva por orden del club, que sigue empeñado en encontrarle otro club antes de final de mes.
Enfrente el conjunto bermellón tendrá a un rival herido y extremadamente exigido. José Luis Oltra no ha podido resistir una racha de once partidos sin conocer la victoria y su destitución, formalizada el martes, le impedirá verse de nuevo las caras con su exequipo. Su relevo, Juan Manuel Pavón, ha ascendido del juvenil al primer equipo para reconducir un rumbo que lleva al ´Decano´ a Segunda B. Ambos contendientes esperan que se cumpla el tópico de ´entrenador nuevo, victoria segura´, pero solo uno lo conseguirá.
El Recre quiere meter al Mallorca en la pelea por la permanencia, y los de Soler quieren abrir brecha con un descenso que solo está a tres puntos. Ya casi nadie mira a una promoción de ascenso que queda a trece puntos, una distancia sideral. Y más para un equipo alicaído que arrastra tres derrotas consecutivas.
Miquel Soler podrá dirigir un partido oficial con el Mallorca 25 jornadas después de que Dudu Aouate le arrebatara el banquillo para dárselo a Karpin. Pero el fútbol da muchas vueltas -más en el club rojillo- y el técnico catalán podrá ejercer al fin, aunque su regreso se produce en un momento muy delicado.
Peor lo está pasando el ´Decano´, que a la racha de derrotas suma una asfixia económica que le ha impedido estar al corriente de pagos con la plantilla y el cuerpo técnico. En todo caso, ni Recre ni Mallorca se librarán hoy de una buena dosis de ansiedad.
