El sector del transporte de mercancías estudia movilizaciones en Sóller que podrían implicar el cese de la distribución en el centro de la localidad, después de que el Ayuntamiento haya eliminado la zona de carga y descarga.
El alcalde Carlos Simarro (PP) justificó esta decisión, porque, dijo, la acumulación de camiones de reparto en el centro afea la imagen turística. «No se puede tener un centro de distribución en el sitio más fotografiado de Sóller», dijo Simarro, quien informó de que el Consistorio ha habilitado zonas aledañas para que se pueda hacer ese reparto.
«No se puede tener un centro de distribución en el sitio más fotografiado de Sóller»
La gerente de la Federación Empresarial Balear de Transportes (FEBT), Petra Mut, aseguró que el sector de los transportistas y los comerciantes califican de «ridícula y pueril» la actitud del alcalde. «Con el traslado de las zonas de carga y descarga a zonas más alejadas del centro de la localidad, lo que se conseguirá es que no se pueda realizar en condiciones el reparto de mercancías», argumentó.
«Con el traslado de las zonas de carga y descarga a zonas más alejadas del centro de la localidad, lo que se conseguirá es que no se pueda realizar en condiciones el reparto de mercancías»
El sector recordó asimismo que presentó una instancia ante el Ayuntamiento en que advertía de un aumento de los riesgos laborales para los profesionales del reparto, como «son el riesgo de atropello al cruzar por las vías del tranvía y por calles de doble sentido de intensa circulación, así como de sufrir lesiones traumáticas al operar las carretillas por suelos irregulares y en pendiente».
Por todos estos motivos, arguyó la FEBT, el sector del transporte de mercancías estudia la posible convocatoria de movilizaciones «que tendrían como consecuencia inmediata la negativa a realizar el reparto y distribución de mercancías en el centro de Sóller, dejando sin este servicio esencial a todos los usuarios». En declaraciones a este diario, Simarro apuntó que el problema del reparto de mercancías en el centro viene «de antaño».
Actividad «bestial»
Simarro aseguró que, hace años, autorizó el carga y descarga entre las seis y las nueve de la mañana, pero apuntó que, en los últimos tiempos, «la actividad en la plaza es bestial».
Apuntó en este sentido el mandatario municipal que se llegan a acumular hasta una decena de camiones delante del Ayuntamiento y la iglesia, y reparten en ocasiones hasta las doce del mediodía. Agregó que el «pavimento no está preparado», por lo que se producen roturas varias y eso supone un peligro para los transeúntes.
«Hemos tenido paciencia por la temporada turística, pero ahora hay que poner orden, porque entre el tranvía que sube y baja, la cantidad de gente que hay, las terrazas… se hace necesario», manifestó el alcalde, quien señaló que han habilitado varias zonas cercanas a la plaza de la Constitució para el carga y descarga. Concretamente. mencionó la plaza de la Estación (de seis a 11 de la mañana), el área del mercado y la calle Jeroni Estada.
«Hemos sacrificado párkings de residentes. Es que no hay más posibilidad. Es un tema físico. La alternativa no puede ser aparcar en la puerta principal de la iglesia ni del ayuntamiento, que son plazas peatonales, con terrazas. El peligro es inmenso para los transeúntes», sostuvo Simarro.
Reforzando sus argumentos, apuntó que, por un tema de seguridad del tranvía, deben instalarse además pilones en el centro neurálgico de Sóller, «por lo que físicamente ya no pueden pasar camiones ni coches».
Respecto a las demandas del sector, que plantea incluso posibles movilizaciones, Simarro quiso usar un tono conciliador y aseguró que se ofrece a «ayudar en lo que pueda».
