Este lunes por la mañana han aparecido por las calles de Santa Margalida y Can Picafort numerosas pintadas y carteles que acusan al alcalde Joan Monjo de «cacique» y de «blanquear el fascismo». La acción ha sido reivindicada por el llamado Frente Obrero y el motivo son las tres multas que suman 6.750 euros que el Ayuntamiento impuso a uno de sus militantes después de una campaña contra el mantenimiento del título de Hijo Ilustre del municipio al magnate Juan March Ordinas. «Estas multas nos dan más razones para seguir plantándole cara y para señalar el cobarde que se esconde tras su fachada de cacique», apunta la citada organización en un comunicado.

La mayor parte de las pintadas reproducen la imagen del alcalde Monjo junto a la palabra 'cacique', aunque en Santa Margalida ha aparecido un mural más grande en el que se acusa al alcalde de "blanquear el fascismo" y de "multar con 6.750 euros a quien lo denuncia".

Tal y como publicó este diario el pasado mes de mayo, un joven militante de la citada organización denunció que había recibido tres sanciones municipales por haber colgado diversos carteles que acusaban a Monjo de ser un "heredero del franquismo". El Ayuntamiento justificó los expedientes en el incumplimiento de la ordenanza municipal que protege el mobiliario urbano, aunque el Frente Obrero aseguró que las sanciones "responden a un motivo político".