El pasado uno de febrero se iniciaron las obras del proyecto de embellecimiento y semipeatonalización, además de la ampliación de la red de aguas pluviales, en la carretera de Artà y la calle Hostaleria del puerto de Alcúdia, donde se ha talado una decena de árboles, causando un profundo malestar entre vecinos y comerciantes de la zona.

Según un informe del área de Medio Ambiente, el mantenimiento de los árboles era «inviable» debido a las obras de ensanche que deben hacerse en las aceras y a la modificación de los servicios soterrados, además de la instalación de pérgolas y otros elementos de mobiliario urbano. El dictamen destaca también que estos árboles «habían ocasionado perjuicios en los últimos años» debido al crecimiento de las raíces y que también han sido atacados por la plaga del cotonet, «provocando molestias a los comercios ubicados en el entorno».

El Ayuntamiento pretende sembrar otras especies de árboles que no sean tan problemáticos.