El ayuntamiento de Alaró, gobernado por el PP, ha exculpado a nivel interno al ingeniero Miquel Busquets por las inundaciones de aguas fecales que afectaron en 2019 a la calle de Can Ros, a pesar de que en la pasada legislatura, el PP en la oposición envió a la Oficina Anticorrupción los contratos entre el anterior equipo de gobierno PSOE-Més y el técnico.
En la junta de gobierno del pasado mes de febrero, a partir de un informe pericial encargado por el Ayuntamiento, se exime de responsabilidad al ingeniero Miquel Busquets, como redactor del proyecto de renovación de infraestructuras soterradas en la calle de Jaume Colom, Metge, de los daños y perjuicios provocados a diversos vecinos y al propio Ayuntamiento por las citadas inundaciones. No obstante, se le impone una indemnización de 1.932 euros por haber redactado un proyecto anterior. Durante la votación de este punto, tanto el alcalde Llorenç Perelló como el edil Juan Lozano se abstuvieron por «enemistad manifiesta» con el citado ingeniero, tal y como se plasma en el acta de la citada junta de gobierno.
El informe pericial concluye que el proyecto de Busquets presenta deficiencias y por ello se le impone una indemnización, aunque el técnico alega que su proyecto, que afectaba a la renovación de la red de la calle Jaume Colom, «se realizó siguiendo el plan fijado por Sorea en 2008». Además, señala que durante la ejecución de las obras se colocó «por error» un tubo de menor diámetro que el recomendado por el ingeniero y que el informe «incluye errores graves de cálculo de caudales».
El alcalde Perelló señaló ayer que el hecho de que Anticorrupcion investigue los contratos del técnico es independiente del caso concreto por el cual se le ha eximido de responsabilidad.
