El Govern activa la recogida de muestras de ADN de familiares de las víctimas de Son Coletes. De momento, la secretaría autonómica de Memoria Democrática tiene localizados a medio centenar de familiares de represaliados que podrían haber sido enterrados en el cementerio de Manacor. Por ello, hace un llamamiento a las familias que sospechan de que su familiar podría haber sido enterrado en Son Coletes y les pide que contacte con el departamento que dirige Jesús Jurado a través del correo electrónico memoria@sgapm.caib.es o del 971 17 89 85.

El objetivo es que los expertos puedan recopilar la mayor información posible sobre los represaliados y represaliadas en Son Coletes, una información que puede ser clave en el proceso de identificación de las 18 víctimas que se han localizado este verano en la primera fase de intervención en el cementerio de Manacor.

La cincuentena de familiares localizados conforma un listado inicial fruto del trabajo de Memòria de Mallorca, el Comitè de Son Coletes y el historiador Antoni Tugores, que se ha coordinado con la Comisión Técnica de Desaparecidos y Fosas de Balears. A todos ellos se les aplicará el protocolo de ADN, que pondrá en marcha la empresa ATICS.

Y es que una vez finalizadas los trabajos de excavación y exhumación de los restos óseos, los especialistas en antropología física y forense han analizado los restos recuperados para extraer sus características físicas. La siguente fase del estudio, que arranca ahora, es recopilar los datos genéticos de familiares de posibles víctimas para cruzarlas con los restos localizados.

Así se activa el llamado protocolo de ADN de los restos y de posibles familiares que incluye la elaboración de árboles genealógicos y la recogida de datos físicos de cada víctima. Así, durante las primeras semanas de septiembre los técnicos de ATICS citarán de forma individualizada a cada familia para recopilar el máximo de información.

Una vez recogidas las muestras biológicas de familiares para la identificación, dicho material se analizará en los laboratorios de la Universitat Autònoma de Barcelona y la Pompeu Fabra, donde el ADN de los familiares se cruzará con los resultados de ADN de los restos localizados en Son Coletes.