El pleno celebrado el pasado viernes en el ayuntamiento de Bunyola aprobó iniciar la revisión de oficio de la licencia de la urbanización Petit Bunyola, una polémica promoción urbanística que ha iniciado las obras frente a la 'possessió' de Can Mas, con el objetivo de recabar una serie de informes técnicos tanto del Consell de Mallorca como del Consell Consultiu que determinen si el permiso concedido por el Ayuntamiento el pasado mes de febrero se ajusta a la legalidad.

El punto aprobado por el pleno implica la paralización cautelar de las obras que se han iniciado recientemente, a la espera de los citados informes y de la decisión definitiva que pueda adoptar después el Ayuntamiento.

La iniciativa del equipo de gobierno se basa en una solicitud del GOB, que ha denunciado el impacto ambiental de la urbanización que incluye la construcción de 36 apartamentos. Solo el gobierno local integrado por Esquerra Oberta y Suma per Bunyola votó a favor de la propuesta de paralización de las obras, mientras que Som Avi se abstuvo, Vox votó en contra y el PP decidió abandonar el pleno.

El alcalde Andreu Bujosa (EO), explicó ayer que el equipo de gobierno cree que "la licencia se concedió de forma correcta, con todos los informes técnicos a favor, pero ahora hemos solicitado estos dos informes para reforzar la concesión de la licencia".

Por otra parte, el alcalde también anunció que revisará de oficio la licencia de construcción de 14 adosados en es Castellet que fue concedida cuando el PP gobernaba el Ayuntamiento.