El Partido Popular de Calvià, en la oposición municipal, ha sugerido al equipo de gobierno la posibilidad de realizar un estudio sobre calas del municipio donde haya riesgos de desprendimiento de rocas, después del trágico episodio reciente que se produjo en Cala Vinyes.

A principios de este mes, una joven murió al caerle una roca de grandes dimensiones en este punto costero, concretamente a la altutra del número 31 de calle Vista de la Mar. La víctima estaba sentada con un amigo sobre la piedra cuando ésta se deslizó y causó el trágico suceso.

Calita de El Toro

A raíz de este precedente, la regidora del PP de Calvià Rosa García utilizó el turno de ruegos y preguntas del último pleno municipal para advertir al equipo de gobierno (PSOE y Podemos-Més) de que hay otros puntos peligrosos en la costa de Calvià. En este sentido, mencionó el caso de la calita de El Toro.

García informó de que en este lugar existen dos piedras que, a simple vista, corren el riesgo de caer, con el consiguiente peligro para las personas que frecuentan la cala. “Va mucha gente a esta pequeña cala. Quizá convendría retirar estas rocas o adoptar algún otro tipo de medida de seguridad para que la gente pueda disfrutar sin riesgo de este lugar”, argumentó García, que sugirió también la posibilidad de realizar un estudio de seguridad sobre otras calas del municipio.

Altura máxima

Por otra parte, el último pleno municipal dio luz verde a una modificación puntual del Plan General de Ordenación Urbana (PGOU) relativa al posicionamiento de las edificaciones en las parcelas. El teniente de alcalde de Urbanismo, Marc López (PSOE), detalló que, con esta variación, cuando el terreno sobrepase un 20% de pendiente, la planta baja no podrá alzarse hasta 1,90 metros como hasta ahora, sino hasta 1,50. El objetivo, según subrayó López, es controlar los excesos edificatorios que se venían produciendo y que hacían que, de facto, muchas de estos habitáculos se utilizasen como vivienda.