La alcaldesa de Alcúdia, Bàrbara Rebassa, firmó ayer un bando en el que ordena a la Policía Local, en colaboración con la Guardia Civil, que intensifique las funciones de control e inspección a los establecimientos sobre la presencia y venta de alcohol a menores en las zonas donde se realicen actividades festivas con motivo de las próximas fiestas de Sant Pere, Mare de Déu de la Victòria y Sant Jaume.

También ordena a los policías a "identificar y retirar las bebidas alcohólicas a menores" y permite la destrucción del género "si así lo consideran oportuno". Asimismo, la Policía Local informará a las familias si los menores han sido sorprendidos en situaciones de riesgo para que "los padres o tutores legales puedan adoptar las medidas de protección que consideren adecuadas para evitar situaciones perjudiciales".

El bando de la alcaldesa Rebassa insta también a los locales de ocio a cumplir la normativa vigente en materia de alcohol.