El pleno de Inca precisó de un largo receso para llegar a un acuerdo acerca de la compra del estadio del Constància. El acuerdo alcanzado con la mayoría de propietarios particulares del Camp Nou entraña un riesgo que Àngel Garcia, portavoz de Independents d'Inca puso de manifiesto durante la sesión. Ese acuerdo supone instar una demanda de división de la cosa común puesto que no han aparecido todos los propietarios. Esta figura jurídica supone que se debería efectuar una subasta pública.

Se decidió continuar adelante con la demanda de división pero con el compromiso indefinido de intentar determinar la identidad de los comuneros que restan y efectuar la compra directa de todas los títulos de propiedad. Garcia alertó de que acudiendo a una subasta se ponía en riesgo la compra del estadio y la posible pérdida de las 165 acciones que son propiedad pública en la actualidad.

Como quedó claro durante la exposición del portavoz de los independientes, si se acudiera a una subasta existe el riesgo de que se presente un tercer postor que ya sabría que el Ayuntamiento de Inca pujará sólo hasta 6.500 euros por acción, que es el precio pactado con los propietarios. Cabe destacar que el valor catastral de las acciones es de 13.000 euros. Eso supone una ventaja para un tercer postor que sabe a priori que con solo aumentar un poco el precio se adjudicaría la propiedad.

Virgilio Moreno, alcalde de Inca, explicó con posterioridad que "es una opción difícil pues un tercer postor sabe que esos terrenos son de uso deportivo privado y que además existe una cesión de usufructo al Constància del que restan 17 años para que venza".

Garcia califica esta postura como ingenua: "Cualquier postor privado sabe que podría adjudicarse unos terrenos que valen como mínimo trece millones por poco más de dos. Después sólo tendría que negociar con el Constància y seguro que llegarían a un acuerdo".

El PP, en la oposición, dio su apoyo exponiendo que lo hacia con el corazón "pero con muchas dudas acerca del riesgo que se está corriendo", afirmó Rafel Torres, portavoz. Durante la sesión, Pere Rotger, agradeció en nombre de los propietarios el esfuerzo municipal y recordó la generosidad de quienes llevaron a cabo el proyecto en favor del Constància en 1964.