La conselleria de Medio Ambiente del Govern cederá, a partir del próximo 30 de abril, la gestión y conservación del aparcamiento del Parque Natural Marítimo Terrestre de es Trenc-Salobrar al ayuntamiento de Campos. Con una duración de cuatro años, entrará en vigor cuando el pleno del consistorio campaner lo apruebe.

En virtud de este convenio, la Conselleria cederá al municipio la gestión del parking de sa Barralina I, aunque con ciertas condiciones, como que el Ayuntamiento no podrá modificar el número de plazas, que deberá garantizar la presencia y maniobra gratuita del transporte público, y que las instalaciones solo se podrán destinar al uso de aparcamiento público.

La gestión se podrá realizar en cualquiera de las formas previstas en la legislación de régimen local y, en el caso de gestión indirecta o mixta, la duración de la gestión por terceros queda vinculada a la vigencia del convenio, explica la Conselleria.

Asimismo el consistorio está obligado a habilitar como peatonal el camino existente que transcurre desde el aparcamiento al núcleo de ses Covetes, así como eliminar la zona azul (O.R.A.) existente en estos momentos. Además, se encargará de recoger y gestionar los residuos generados a lo largo de la playa comprendida dentro del Parque Natural, en la zona del aparcamiento y el camino mencionado.

El consistorio presentará de manera anual a la Comisión de Seguimiento, las iniciativas y los proyectos realizados dentro del ámbito del Parque Natural relativos a su gestión y conservación, movilidad sostenible, mejora de los accesos, vigilancia, educación y sensibilización ambiental. También se encargará del seguimiento y control de los efectos del aparcamiento en la flora, la fauna y el medio del Parque.

Ambas partes se comprometen a coordinar el personal que desarrolle tareas del aparcamiento y del Parque, y a señalizar los aparcamientos y el camino para peatones, de acuerdo con los criterios de identidad corporativa y el manual de señalización de los espacios naturales protegidos de la Conselleria.

Casi 500 plazas

El proyecto contempla la construcción en la zona de sa Barralina I, de un aparcamiento de uso público para un total de 497 plazas para vehículos motorizados, con regulación de accesos y flujo para los mismos y con presencia permanente de personal con funciones de control y seguridad durante las horas de utilización del aparcamiento.