Campanadas, uvas, música y cava para despedir el 2018 y dar la bienvenida al nuevo año. Los pueblos de Mallorca celebraron con ilusión la Nochevieja, aunque en algunos municipios, los vecinos criticaron la dejadez de los ayuntamientos para preparar la fiesta que se dejó notar en pequeños detalles. Es el caso de Alarò, donde dieron la bienvenida al año 209 en lugar del 2019.
Alaró
Deslucido fin de año en Alaró. El escaso esfuerzo municipal se dejó notar en unas campanadas que apenas se oyeron, sin música, fuegos artificiales de poco presupuesto y hasta un luminoso averiado que celebró la entrada del año 209 en lugar del 2019.
Llucmajor
La plaza de Espanya de Llucmajor, justo frente a la torre del reloj del Ayuntamiento, se convirtió anoche en la gran sala de música y baile al aire libre en la que despedir el 2018 y dar la bienvenida al nuevo año. Tal fue la acogida vecinal que el espacio se llenó de las mejores galas para desear los mejores augurios.
Manacor
La Plaza Weyler de Manacor se volvió a convertir esta Nochevieja en el escenario para dar la bienvenida al 2019. Pero la fiesta fue especial. Y es que los presentadores se propusieron convertir la plaza 'manacorina' que está a los pies del campanario, en "la sala de estar más grande del mundo". Por lo que días antes animaron a todos a ir a comer las uvas con sillas, sillones y otros elementos típicos de los comedores. Esta iniciativa, que día antes recibió el apoyo de equipos deportivos, asociaciones y entidades del municipio, funcionó y fueron muchos quienes sen sintieron 'como en casa' frente al escenario. Después, la música continuó al aire libre hasta las dos de la madrugada.
Porreres
Los porrerencs se reunieron frente al reloj del campanario de la parroquia para dar la bienvenida al nuevo año con las doce uvas que se reparten desde el ayuntamiento. Este año la novedad fue la sustitución de la pirotecnia por un espectáculo de luces y sonidos. Tras las campanada, se cumplió con la tradición de dar "molts d'anys" con una copa de ron "cremat".
Son Servera
La plaza de Sant Joan de Son Servera, se llenó hasta la bandera, para tomar las uvas en la despedida de 2018. Este año, entre el numeroso publico asistente hubo una gran afluencia de turistas y visitantes para festejar el nuevo año. El consistorio repartió uvas y cava para los asistentes y amenizo el acto con actuaciones musicales. La celebración se prolongó hasta bien entrada la madrugada.
Vilafranca
El pueblo de Vilafranca de Bonany, en la comarca del Pla, se vistió de gala para festejar el cambio de año. Los más jóvenes del municipio disfrutaron de las Campanadas vestidos de gala frente a la escalinata de Santa Bàrbara.
