Ayer por la mañana se iniciaron los actos para la fiesta del Vi Novell, que tendrá continuidad el próximo fin de semana, con la participación de la Colla de Gegants de Santa Maria, acompañados de los cabezudos y sus músicos. Niños del municipio se desplazaron, a las diez treinta de la mañana, hasta el pinar de Son Llaüt, para proceder al talado de los brots de pi (ramas de pino) y posteriormente recorrer las calles del pueblo para colocar estos brots de pi a lo largo de las calles, y finalizar en la Plaça de la Vila, con la colocación de un brot en la casa consistorial, y así anunciar la próxima Festa del Vi Novell.

Todos los participantes en esta romería, al llegar a Son Llaüt,fueron invitados por parte del consistorio, así como de los cellers, a una merienda, donde los bodegueros, artífices de esta fiesta, ofrecieron además a los asistentes una degustación de vinos de anteriores añadas, ya que el Vi Novel de este año no podrá degustarse, hasta el próximo sábado, día 24.

Participación

En la romería participaron un centenar de personas, añadiéndose más a lo largo del recorrido de la misma. Una vez llegados a la Plaça de la Vila, se procedió por parte de Irene Madroleño, a recrear un cuento, para los más pequeños, cuyo título era Es Raim inquiet, donde explicaba a los niños las características que tiene el Vi Novell.

Para los más pequeños la presencia de los cabezudos fue un buen reclamo, así como la posibilidad de desplazarse en los tractores, de los bodegueros, del tren del vino y del tren de madera, que fue recorriendo los cellers, incrementó la alegría de los niños y niñas que asistieron al acto.

Esta primera salida a por los brots de pi finalizó con la colocación por parte de los bodegueros y del Ayuntamiento de la rama mayor de todas en Ca s'Apotecari, centro de promoción económica del municipio y futuro museo del Vi Novell.

Uno de los objetivos de esta fiesta es que los más pequeños participen de esta diada, a fin de que conozcan la importancia de esta tradición vinícola de Santa Maria.

Continuidad

Este fue ayer el inicio de la fiesta del Vi Novell, que tendrá su continuidad el viernes con el acto protocolario donde los bodegueros ofrecerán al pueblo el vino del año y recibirán el brot de pi que lucirá en su puerta durante todo el año. Igualmente se hará entrega de las insignias Brot de Pi 2018 a Macià Capó, antiguo propietario de viñas; a Joana Cabot, por su difusión de la cultura del vino a través de su obra artística; y a Andreu Oliver de las Bodegas Can Majoral.