"Haremos lo que haga falta para parar el proyecto". Así se pronunció ayer la Plataforma Antiautopistes -por medio de uno de sus representantes, el presidente del GOB, Amadeu Corbera- ante el inminente inicio de las obras de la autovía entre Llucmajor y Campos. "Todavía hay tiempo para repensar la futura carretera", fue el mensaje que se lanzó en rueda de prensa desde este colectivo integrado por organizaciones ecologistas y ciudadanas.

Cuando se le preguntó a Corbera si al decir esto plantea un escenario como el que hubo en Eivissa hace unos años, en que se registraron duras acciones de protesta a gran escala de los antiautopistas, respondió: "Eso depende del Consell. Depende del Consell si quiere llegar con este tipo de imágenes a las elecciones del año que viene. Lo que no queremos es que nos estafen".

Estas declaraciones las efectuó en un acto informativo convocado por la plataforma para presentar las imágenes captadas por un dron del trazado que seguirá la futura autovía entre Llucmajor y Campos, cuyo entorno, según remarcó Jaume Adrover (Terraferida), quedará "arrasado" con el proyecto viario. Está previsto que las obras empiecen mañana.

51 hectáreas

Los portavoces de la plataforma recordaron que la autovía afectará a 51 hectáreas y, al menos, a medio centenar de elementos singulares (entre viviendas, la antigua vía de tren, cultivos varios, una cueva natural que sirvió de refugio en la Guerra Civil, avencs y barraques catalogadas). Todo lo cual, subrayaron, cambiará la fisonomía de este territorio agrícola de gran valor paisajístico y etnográfico. "Hacemos un último llamamiento para que no empiecen las obras. Estamos a tiempo de repensar el proyecto", afirmaron desde la Plataforma Antiautopistes, que recordó que, en su programa electoral, Més per Mallorca incluyó un punto referente a "suprimir las autopistas camufladas de desdoblamiento".

Adrover hizo especial hincapié en el impacto de una infraestructura, que, según detalló, tendrá 43 metros de anchura, frente a los 10 metros que como máximo cuenta la actual vía. Recordó además que la autovía que une Palma y PalmaManacor presenta una anchura de entre 22 y 24 metros, al tiempo que destacó lo desmesurado de la "megarrotonda" proyectada.

"La rotonda es doble y ocupa entre cuatro y cinco hectáreas", enfatizó Adrover. "Había opciones menos impactantes", agregó el representante de Terraferida, quien aseguró que ellos nunca han cerrado las puertas a estudiar medidas para mejorar la seguridad de la actual carretera.

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