El Servicio de Atención al Ciudadano (SAC) del ayuntamiento de Andratx está "desbordado". Su sede, en el Castell de Son Mas, suma a diario quejas y largas esperas de vecinos para ser atendidos, en especial entre las nueve de la mañana y las 13 horas, según coinciden en denunciar la oposición y los sindicatos.

Sin ir más lejos, ayer, un vecino de la localidad estuvo esperando una hora y media para ser atendido. El usuario, según indicó a este medio, pretendía recabar información sobre ayudas destinadas a personas con discapacidad.

El Servicio de Atención al Ciudadano se puso en marcha hace tres legislaturas de la mano del tripartito formado por PSOE, PSM, y UM. El objetivo principal de este servicio es agilizar los trámites de los ciudadanos con la administración. Durante los últimos meses, incluso en el SAC han puesto en marcha un sistema electrónico para poder tramitar de forma más ágil y eficaz toda la documentación, pero las esperas en la sala siguen siendo muy largas. La dirección política del SAC de Andratx recae en la alcaldesa Katia Rouarch (El Pi). Desde el PP, Jaume Porsell indicó a este medio que, como socio de gobierno de Rouarch, su formación "intenta mantenerse al margen de la situación creada en Son Mas". Aun así reconoció que tal estado de cosas "repercute directamente en los departamentos que gestiona el PP" y eso les "preocupa profundamente".

"Reestructuración general"

Desde el PSOE, su portavoz en la oposición municipal, Abilio García, reclama más personal en el SAC y añade que "es necesario incluso una reestructuración general". Según indicó García, el problema del tiempo de espera para tramitar cualquier documentación "es preocupante". El socialista consideró que " la situación en el SAC se agrava con los nuevos protocolos implantados y con ello se satura la labor del personal destinado en esas oficinas".

Mientras, el grupo municipal de Més recordó que ya llevó este problema al debate plenario. "Parece que no hay quien coordine el SAC ni se preocupe por las puntas previsibles de trabajo que hay", afirmaron.

Por su parte, CCOO culpó directamente a la gestión política que se está aplicando en este departamento. Considera esta fuerza sindical que se está llevando este servicio municipal al borde del caos. "Se trata de un barco a la deriva gestionado exclusivamente por la alcaldesa del municipio", arguyeron.