Juan Trobat es un octogenario gabellí apasionado de la colombofilia, que desde los catorce años viene criando palomas mensajeras. Actualmente cuenta con 80 ejemplares. Desde hace unos días, realiza diariamente sentadas delante de la puerta del ayuntamiento de Capdepera, sin importarle el sol, ni las altas temperaturas. Se protege con un sombrero y un cartón le cubre la herida en una pierna, que según prescripción facultativa no puede estar expuesta a los rayos solares.

Según comentó ayer el propio Trobat a Diario de Mallorca, se trata de una reivindicación que se inició un 8 de junio de 2016, cuando acudió al mercado para exhibir unos ejemplares de sus palomas que pronto llamaron la atención de jóvenes turistas. Según su relato, se le acercó un policía local y le dijo que si no se marchaba le quitaría las palomas, y así fue, se las incautaron. Al día siguiente Trobat fue intervenido quirúrgicamente y no pudo volver a recuperar sus aves hasta haberse recuperado de la operación. Al acercarse a la comisaría le explicaron que las aves habían sido enviadas a Natura Parc.

Trobat dice que según le han informado debía haber transcurrido un periodo de 40 días antes de llevárselas, pero de esto él no entiende. Así que decidió acudir al alcalde, el socialista Rafel Fernández, que le facilitó el número para ponerse en contacto con Natura Parc. Trobat señala que nada más salir del consistorio llamó al centro donde le informaron que las aves habían sido sacrificadas. Se lo comentó al alcalde, quien, según Trobat, le aseguró que miraría de hacer algo, pero que a día de hoy, no ha hecho nada, por lo que ha decidido hacer una sentada en la puerta del consistorio. Así también se lo comunicó a la Policía Local, que le reclama una multa de 60 euros, que no se niega a pagar, siempre que le devuelvan o le paguen la jaula y los animales incautados.

La versión municipal

Ante la expectación levantada en el municipio, el ayuntamiento de Capdepera ha emitido un comunicado oficial, con su versión de los hechos. En el comunicado se informa de que los animales fueron incautados por la Policía Local después de percatarse de la presencia en el mercado semanal de Juan Trobat, con una jaula con diez ejemplares de paloma, en la plaza del Orient.

El agente de servicio le explicó que tenía que retirarlos al no disponer de licencia y se le insistió de que si no lo hacía sería denunciado y se le decomisarían los animales. Ante la negativa, la Policía Local, con la ayuda de la Brigada municipal, decomisó la jaula con los animales en custodia transitoria hasta ser recogidos por el Centro de Protección de Animales Domésticos (CEPAD) para su custodia definitiva. Según el comunicado, el CEPAD retiró la jaula con los animales vivos y se avisó al afectado de que, para recuperarlos, tenía que pagar la tasa en la oficina de la Policía Local y recoger los animales en las instalaciones del CEPAD. Según la nota y en referencia al inspector de la Policía Local, "jamás se solicitó el retorno de los animales, ni se pagó la tasa correspondiente".

Desde el Ayuntamiento también se asegura que se ha informado al señor Juan Trobat y sus familiares en reiteradas ocasiones. Mientras, el afectado ayer seguía su protesta pacífica, a pesar de la ola de calor y manifestaba a este periódico que allí seguirá hasta que se le dé una solución.