El ayuntamiento de Artà no acaba de entender la demora de la conselleria de Medio Ambiente, Agricultura y Pesca a la hora de poner en marcha una plan efectivo para ampliar el Parc Natural de la Península de Llevant, estableciendo la correspondiente zonificación y regulación de usos, impulsando un nuevo Plan de Ordenación de los Recursos Naturales (PORN) y ampliando la zona protegida espacialmente hacia las fincas públicas de es Racó, sa Duaia y es Canons.

El equipo de gobierno artanenc, formado por El Pi, PSOE y Alternativa, considera que el parque actualmente sigue sin contar con una planificación básica ajustada a su realidad territorial, que debería ser quince veces superior a la superficie reducida de hoy en día. Y que por eso es imposible, por ejemplo, poner en marcha determinados usos deportivos o de aventura, como hace unos meses Unió d'Independents d'Artà.

Promesas

Y es que pese a que la conselleria de Medio Ambiente ha incorporado en su hoja de ruta la ampliación del parque natural, todavía no se ha dado ningún paso hacia ese objetivo, lo que inquieta al consistorio, que ha vuelto a aprobar (con la única abstención del concejal del PP), pedir al Govern la ampliación de facto hasta, al menos, la superficie que ocupaba en el momento de su concepción en el año 2001.

En la actualidad, el Parc Natural de Llevant tiene una superficie total de más de 1.500 hectáreas e incluye fincas públicas como las cases d'Albarca, la casa de s'Arenalet y la casa dels Oguers.

"Estamos esperando una respuesta de los ecosoberanistas, pero seguimos sin ver un gesto. Somos un Ayuntamiento que no tiene ingreso alguno de nuestro litoral, por lo que es siempre un equilibrio muy sensible", explica Aina Comas, concejala de Medio Ambiente, que recuerda que el cierre, la pasada semana, del acceso a Cala Torta para vehículos motorizados, responde a una necesidad urgente por mantener el paisaje local.

"Estamos tapando agujeros de administraciones supramunicipales. Era una cuestión de contención y emergencia. Lo de Cala Torta (territorio protegido sobre el papel mediante distintas normativas medioambientales) y de otras zonas costeras es una preocupación latente que hemos asumido, así como también tendremos que asumir las críticas", pese a que debería ser una labor directamente de la Conselleria.

Caballos en las dunas

Artà también pide la dotación, por parte del Govern, de herramientas de planificación que permitan la protección efectiva de otros territorios municipales como la Muntanyes d'Artà o la emblemática playa de sa Canova, donde es normal ver excursiones de caballos montados junto al arenal, traspasando la línea de protección del sistema dunar y vulnerando así el plan especial aprobado en 1990 que lo impide; en una zona que es ANEI (Área Natural de Especial Interés) y LIC (Lugar de Interés Comunitario) en la zona del torrente de na Borges.

Pese a ello, todavía es posible reservar excursiones privadas con total normalidad a través de una empresa-rancho cercana sin que ello comporte ningún tipo de vigilancia o sanción. Una situación que también ha denunciado en varias ocasiones el GOB.

"El plan especial de protección del Área Natural de Especial Interés de sa Canova, aprobado definitivamente en 1990, ya prohibió el tránsito de caballos sobre las dunas. Sin embargo, el Ayuntamiento como administración competente para la aplicación del Plan no ha dispuesto nunca de medios suficientes para garantizar el cumplimiento de la medida. "Somos un Ayuntamiento pequeño y con una Policía Local limitada", recuerda Comas, al referirse a la necesidad de protección que tiene la costa artanenca y la implicación que debería tener el Govern en ella.

Sin avances

Precisamente ayer el GOB argumentaba que "es muy preocupante que desde 2015 y a lo largo de esta legislatura, la conselleria de Medio Ambiente no haya aprobado ni un solo nuevo plan de gestión Natura 2000". "En el plan normativo 2018 el Govern tiene prevista la aprobación de varios planes de gestión de LIC y ZEPA, aunque a estas alturas no se ha aprobado ninguno y sólo la mitad han pasado ya a consulta pública.

Para los ecologistas "contar con una buena planificación es un paso previo e imprescindible para llevar a cabo una adecuada gestión de los espacios naturales protegidos".