El pleno del ayuntamiento de Bunyola aprobó el pasado jueves la primera ordenanza de horarios comerciales del municipio. El nuevo reglamento regulará a partir de ahora el horario de apertura y cierre de los bares del pueblo y de montaje y retirada de las terrazas, una demanda histórica de los vecinos de la plaza y las calles más próximas, donde se concentran la mayoría de bares del pueblo.
El equipo de gobierno (EOB-PSOE) sacó adelante la nueva regulación, que no fue apoyada por los partidos de la oposición (PP y AVI).
"Queremos que la ordenanza sea una norma de convivencia que conjugue el derecho al descanso y el derecho al ocio", afirmó el alcalde, Andreu Bujosa, tras reconocer que "sabemos que no satisface al cien por cien a ninguno de los implicados".
Antes de su aprobación, el equipo de gobierno había realizado una campaña informativa del borrador de la ordenanza y organizó varias reuniones con vecinos, bares y jóvenes, que presentaron sugerencias al proyecto, además de organizar una asamblea abierta.
La ordenanza regula los horarios de los establecimientos dividiéndolos en varios grupos, el primero de los cuales se refiere a los bares, situados en el centro de la polémica porque actualmente son los únicos de los que se regulan existentes en los núcleos urbanos.
Se establecen dos horarios: de invierno (del 1 de octubre al 31 de mayo) y de verano (de 1 de junio al 30 de septiembre). Este segundo se alarga a septiembre ya que Bunyola celebra las fiestas patronales entre mediados y finales de ese mes.
Durante el invierno, los bares podrán realizar su actividad entre semana entre las siete de la mañana y las doce de la noche, mientras que los viernes, sábados y vísperas de festivos, podrán alargarla hasta a una de la madrugada.
En cuanto a las terrazas, en invierno deberán desmontarse como máximo a las doce de la noche todos los días. En verano, los bares podrán tener actividad desde las siete de la mañana hasta a una de la madrugada y los viernes, sábado y vísperas de festivos, hasta las dos. El cierre veraniego de las terrazas se mantendrá a las doce de la noche entre semana y a la una los viernes, sábados y vísperas de festivos.
Los vecinos de la plaza, algunos de los cuales estuvieron presentes en el pleno, manifestaron su desacuerdo con la normativa y se quejaron del ruido que deben soportar hasta altas horas de la madrugada, especialmente los fines de semana por lo que abogaron por el cierre de los bares a las doce de la noche.
La misma posición mantuvo el grupo AVI, mientras que el PP criticó "los agujeros" que presenta la ordenanza especialmente porque en estos momentos Bunyola no cuenta con servicio de Policía Local durante las madrugadas ya que la plantilla es insuficiente y la Ley Montoro no permite al consistorio crear nuevas plazas de empleo a las administraciones locales. "Si hacen una ordenanza, deben poner las herramientas para hacerla cumplir", afirmó el portavoz popular, Juan Antonio Estarellas.
En este sentido, el alcalde Andreu Bujosa aseguró que cuando la normativa entre en vigor, "se hará cumplir" y anunció un plan de acción que incluye varias opciones, como que la Policía Local realice horas extra y la firma de convenios con municipios vecinos, como Santa Maria, para compartir policías locales y cubrir las horas que cada pueblo no puede cubrir con agentes propios.FOTO: La mayoría de bares y terrazas se concentran en la zona de la plaza.
