El núcleo de Son Serra de Marina provoca continuos quebraderos de cabeza al ayuntamiento de Santa Margalida. En plena polémica por los chiringuitos playeros, el equipo de gobierno (PP y Convergència-El Pi) ha recibido ahora una sentencia judicial del Tribunal Superior de Justicia de Balears (TSJB) que obliga al Ayuntamiento a expropiar dos solares de la localidad costera por un importe de 1,2 millones de euros. El fallo fue dado conocer durante el transcurso del último pleno de la corporación municipal.
Los dos solares que deberá expropiar el Ayuntamiento forman parte de una gran superficie de unos 60.000 metros cuadrados que en las Normas Subsidiarias del año 1986 fue clasificada como zona de equipamientos comunitarios y espacio libre público. El motivo, según explica el teniente de alcalde Joan Monjo, es que en el año 1983 la comisión provincial de Urbanismo que declaró el núcleo de Son Serra como urbano obligaba al Ayuntamiento a tener unas dotaciones mínimas de zonas verdes.
Este sector incluye siete parcelas diferentes, tres de las cuales ya forman parte del patrimonio municipal, ya que dos de ellas fueron cedidas al Ayuntamiento en el año 1986 y otra fue adquirida por la institución local durante la pasada legislatura. Dos de los propietarios de los cuatro solares restantes que son privados solicitaron hace unos años la expropiación por parte del Ayuntamiento porque los terrenos iban a ser destinados a equipamientos públicos.
Litigio con los propietarios
El Consistorio alegó entonces que no era necesaria la expropiación porque la zona de equipamientos públicos grafiada en las NNSS también podía incluir zonas de uso comercial o deportivo privado. A pesar de ello, los propietarios optaron por seguir adelante en su petición de expropiación y en 2009 presentaron una valoración económica de los terrenos que sumaba unos 3 millones de euros, calculando que el solar más grande, de 20.000 metros cuadrados, costaba 2,15 millones, mientras que el más pequeño, de 7.500 metros cuadrados, tenía un valor de 847.000 euros. De esta forma, el metro cuadrado se calculaba en 109 euros.
Sin embargo, en febrero de 2011 el jurado provincial de expropiación realizó una nueva tasación de los dos solares de Son Serra, fijando un precio de 306.000 euros para la finca pequeña y de 834.000 euros para la grande. El metro cuadrado costaba 41 euros.
Los propietarios decidieron recurrir al no estar conformes con la valoración de los terrenos, mientras que el Ayuntamiento hizo lo propio porque consideraba que no era necesario entrar en un proceso de expropiación. Finalmente, el TSJB se ha pronunciado fijando un precio de 32 euros por metro cuadrado. De esta forma, la valoración de los terrenos se ha fijado en 900.000 euros más otros 300.000 euros en concepto de intereses desde el año 2009.
Recurso municipal
El teniente de alcalde Joan Monjo confirmó que el Ayuntamiento presentará un recurso ante el Tribunal Supremo para evitar la expropiación y se supone que los propietarios también presentarán recurso para conseguir una mejor valoración de los terrenos.
Monjo añadió que todavía quedan dos terrenos privados en este sector de equipamientos comunitarios y que si los propietarios también solicitan la expropiación, el Ayuntamiento "tendría que pagar en total entre 1,5 y 2 millones de euros (por la expropiación de los cuatro solares)", una cantidad importante que, según el regidor, posiblemente implicaría que los vecinos de Son Serra tuvieran que pagar contribuciones especiales.
