Diferentes vecinos han expresado a este diario su malestar por el hecho de que se haya tomado la decisión de no sacar este próximo Jueves Santo la cruz, de más de 200 kilos, de la Confraria del Davallament de ses Salines. Según varios residentes, las desavenencias entre dos miembros de la cofradía están a punto de provocar que tras 25 años de lucir el llamado "pas de ses cucues negres", este próximo jueves se quede éste en un garaje particular lleno de objetos. En su lugar se portaría La Puríssima de la iglesia. El Viernes Santo, sólo cucues.