Los socialistas de Calvià anunciaron ayer que presentarán alegaciones a la nueva ordenanza de residuos, aprobada inicialmente en el pleno del pasado mes de noviembre. La oposición cuestiona sobre todo la obligatoriedad de la separación de residuos a nivel doméstico, al considerar que resulta inadecuada tal y como se redacta, pues permite el control en las casas de los calvianers por parte de "personal autorizado" y "sin previo aviso", tal y como informó en su edición de ayer este diario.

Del mismo modo, la correspondiente imposición de sanciones también genera "muchas dudas" al PSOE. Por ello, anuncian que presentarán alegaciones a esta ordenanza, para modificar varios de los aspectos incluidos en cuanto se publique en el BOIB la aprobación inicial y el plazo de alegaciones. Los socialistas considera que sería "un despropósito" ese control en los domicilios. "Antes que llegar a esos extremos se deben reiniciar unas campañas de información efectivas que mejoren y renueven la concienciación ciudadana por el reciclaje y la protección medioambiental", dicen.