Cuarenta y dos donantes de sangre de Lloseta recibieron ayer por la mañana, en la zona ajardinada de Can Seda y ante numeroso público, las correspondientes insignias y diplomas por haber alcanzado las 10, 25 y 50 donaciones. También presenciaron la inauguración de un monolito en el mismo lugar ofrecido por el Ayuntamiento con la siguiente leyenda: Lloseta als donants de sang.

El acto se desarrolló después del oficio religioso en el templo parroquial con motivo de la fiesta patronal de Lloseta. Este homenaje a los donantes de sangre de la población estuvo presidido por la consejera de Sanidad y Consumo del Govern balear, Ana Castillo; por el gerente de la Fundación del Banc de Sang i Teixits de les Illes Balears, Víctor Gistau; por el presidente de la Germandat de Donats de Sang, Llorenç Vallori y por el alcalde de Lloseta, Bernat Coll. Después de entregadas las insignias y diplomas a los donantes se le hizo entrega al Ayuntamiento de Lloseta de una placa de agradecimiento por su colaboración en la donación de sangre.

Homenaje

A continuación, las autoridades y donantes de sangre procedieron a descubrir el monolito de piedra erigido en su honor en los jardines de can Seda. El responsable de la Hermandad de Donantes de Sangre en Lloseta, Pau Reynés, explicó en el acto de presentación que el pueblo de Lloseta inició la donación de sangre en el mes de abril de 1976.

En el acto que se celebró se impusieron 30 insignias a donantes por haber alcanzado 10 donaciones; 10 insignias de 25 donaciones y 2 insignias de 50 donaciones. También señaló Reynés que durante el pasado año se realizaron en Lloseta 4 colectas de extracción con la obtención de 297 bolsas de sangre, añadiéndose 8 nuevos donantes. Finalmente el Ayuntamiento ofreció un refrigerio en el casal de Can Seda.