Estos son los tesoros y secretos de Can Pueyo, la casa señorial en Palma que ha comprado el empresario asturiano Víctor Madera

Tapices flamencos, pinturas de diferentes épocas, colecciones de cerámica y vidrio, lámparas venecianas son algunas de las piezas que decoraban las salas del palacete barroco

M. Elena Vallés

M. Elena Vallés

Can Pueyo es una de las más importantes casas señoriales de Palma a tenor de su valor histórico y patrimonial. Está protegida como BIC con categoría de monumento. El palacete que acaba de comprar el empresario asturiano Víctor Madera constituye uno de los ejemplos más significativos de las construcciones civiles barrocas de Palma levantadas y amuebladas por la nobleza mallorquina.

Este tipo de casales se caracteriza por la ampliación de los espacios, con la adicción de viviendas y con una disposición y fisonomía de las plantas características de las casas señoriales de Palma: un gran patio con escalera, una fachada sobria, independiente del estilo barroco del interior, y la transformación de éste con un conjunto de salas alineadas. Esta transformación no sólo afectó al aspecto exterior de las viviendas, sino que también se llevó a cabo en su decoración interior con el fin de mostrar a la sociedad la ostentación y riqueza de sus propietarios. En estos interiores, de los que Can Pueyo constituye uno de los mejores referentes que nos ha llegado, la nobleza mallorquina les atavió con unas ricas pinturas, telas y tapices, mobiliario de maderas nobles y otros objetos artísticos de gran valor cultural, no sólo en su riqueza material sino en la aplicación de unas pautas decorativas que, en el caso de Can Pueyo, se han mantenido inalteradas a lo largo de los siglos.

Los técnicos del Consell, tras varias visitas al casal antes de la declaración BIC del inmueble, recogieron en un informe que el inmueble había sufrido “importantes afectaciones en cuanto a sus interiores, decoración y bienes muebles”.

Sustrato gótico

Los expertos datan el casal entre los siglos XVII y XVIII, con sustrato gótico y aportaciones neoclásicas. Está ubicada en la calle Can Pueyo, número 4, detrás del Gran Hotel de Palma, en la parte baja de la Rambla. Sus terrenos llegan por la parte de atrás hasta la antigua riera, actualmente la Rambla.

Can Pueyo es el resultado de diferentes modificaciones y ampliaciones de la antigua casa de la familia Sunyer, que por razones matrimoniales entroncó con la familia Pueyo y por tanto con el título nobiliario de Campofranco. De hecho, su última propietaria, Almudena de Padura y España, es la marquesa de Campofranco.

El empresario asturiano Víctor Madera compra otra casa señorial en Palma, Can Pueyo

El empresario asturiano Víctor Madera compra otra casa señorial en Palma, Can Pueyo / -

El patio del casal presenta forma de cruz griega irregular con la parte central descubierta. La escalera de piedra se ilumina por una ventana ojival de gran tamaño. En el primer tramo se abre una puerta hacia el entresuelo.

Subiendo por la escalera se encuentra el rellano que da entrada a la planta noble donde se sitúan las salas buenas, las salas de apariencia, “hoy faltas de la decoración que ahora ahora las conformaban”, señala el informe del Consell.

Las salas

El primer aposento principal, un recibidor, que tendría que estar ataviado con diferente mobiliario y cuadros, da paso al resto de salas principales: la sala de las arquillas, la de la chimenea, la cuadra de la alcoba, la alcoba propiamente dicha, con su tocador, la biblioteca y la capilla.

El empresario asturiano Víctor Madera compra otra casa señorial en Palma, Can Pueyo

El empresario asturiano Víctor Madera compra otra casa señorial en Palma, Can Pueyo / -

En cuanto a la decoración de la casa, inventariada a partir de fuentes bibliográficas, sobresalen los tapices flamencos del siglo XVII, firmados por Raes e inspirados en cartones de Rubens donde se representan varias escenas de Phaeton y tejidos expresamente para las salas de la planta noble; colecciones de cerámica y vidrio; pinturas de diferentes épocas, con autorías como Guillem Mesquida, Paolo Veronese, Esteban Murillo o tallas de Pedro de Mena. También cuenta con importantes piezas de mobiliario como bargueños italianos, cornucopias, lámparas venecianas, cajoneras mallorquinas y donde destacan algunas piezas de Adrià Ferrà, como la cama imperio de la alcoba.

Mención especial merece la biblioteca, que incluye la de Josep de Pueyo i Pueyo, III marqués de Campofranco, y parte muy importante de la Biblioteca de Bonaventura Serra i Ferragut.