Los 280 alumnos del colegio Santíssima Trinitat llevan desde principio de curso sin poder utilizar el patio del centro, situado en la calle Concepció, después de que el Ayuntamiento de Palma haya paralizado unas obras de mejora en el centro justo antes del inicio de las clases. La escuela, los padres y el arquitecto responsable del proyecto explicaron este martes que Cort les deniega la construcción de un aparcamiento que ellos no han solicitado ni quieren hacer.
«El Ayuntamiento no puede denegar una licencia para algo que no pedimos», denunció el arquitecto Manel Forteza-Rey. Este técnico aseguró que las obras paralizadas son una pavimentación del patio y la mejora de unos baños, además de la ampliación de la puerta que da a la calle Catany, para posibilitar que el camión del catering y otros puedan descargar cuando sea necesario, intervención que parece ser la causa de toda esta situación.
Ya en febrero, cuando se solicitó el permiso para estas obras, «el Ayuntamiento puso pegas» alegando que no permitía la construcción de un aparcamiento en el patio del centro, comentó el arquitecto. En ese momento, por parte de la escuela y de Forteza-Rey se aclaró que no se trataba de un parking y que no se había planteado esa posibilidad. Con el visto bueno de Patrimonio del Consell de Mallorca, ya que el colegio es un edificio catalogado, y sin una nueva comunicación del Ayuntamiento, comenzaron las obras en agosto, con la previsión de que acabaran a principios de septiembre.
Con el patio en obras y un retraso en su ejecución, justo un día antes de que comenzara el curso, el Ayuntamiento ordenó la paralización de la reforma reiterando que no se podía construir un aparcamiento. Inmediatamente, Forteza-Rey se puso en contacto con el gerente de Urbanismo y con el departamento de Licencias.
La escuela, los padres de alumnos y Manel Forteza-Rey solicitaron este lunes retomar las obras al menos para que los niños puedan salir al patio. Tras la rueda de prensa que ofrecieron en el colegio, la regidora de Urbanismo, Neus Truyol, anunció que se permitirá acabar el patio, pero que se debe justificar por escrito la necesidad de ampliar la entrada al centro por la calle Catany. Esta petición será estudiada el próximo martes por la Comisión de Centro Histórico de Palma, al tratarse de un edificio catalogado.
"Entendemos la preocupación y la necesidad del centro escolar", añadió Truyol, quien aseguró que ya hay una "solución plenamente encaminada".
