Los residentes de la Residencia y Centro de Día Son Güells han solicitado al Ayuntamiento de Palma que impida la construcción de una cementera y "no autorice ningún tipo de actividad industrial contaminante" a menos de dos kilómetros de la residencia.

También quieren que el Ayuntamiento recalifique los solares sin edificar de Son Güells y del polígono colindante de Son Morro y limite su actividad a usos no contaminantes.

Para mostrar su petición, los usuarios han remitido una carta al alcalde de Palma, José Hila, donde le muestran su "indignación" por la toma en consideración del informe emitido por la Comisión balear de medio ambiente, "favorable a la construcción" de una fábrica de cemento en un solar que "está justo al cruzar la calle".

Según recuerdan, Son Güells es la única residencia de Mallorca para personas menores de 65 años con graves enfermedades degenerativas y grandes discapacidades. La mayoría sufre también serias insuficiencias respiratorias. De esta manera, aseguran que la ubicación junto a la residencia de una cementera supondría la "exposición continuada a polvo de cemento en suspensión".

Además, indican que el tránsito de camiones "pondría en peligro la seguridad" de los que a diario, a pesar de "la mala accesibilidad", salen de la residencia en sillas de ruedas.

Aunque confían en que el Ayuntamiento desestime el proyecto --después de "las protestas vecinales y de las irregularidades denunciadas por GOB"--, los residentes quieren "dejar constancia" de su "indignación" ante el hecho de que una comisión creada para velar por la protección ambiental del entorno humano "no haya desestimado automáticamente" la instalación de una actividad altamente contaminante a un cruce de calle de su hogar.

Por otra parte, han reiterado su queja sobre "la total falta de adaptación" de su entorno urbano a sus necesidades de movilidad.

En este sentido, recuerdan que en colaboración con el personal de la residencia, en 2017, elaboraron un mapa virtual con "los principales puntos negros" en sus rutas habituales que "ha sido ignorado" por el Ayuntamiento, lo que les obliga "a la mayoría" de ellos a permanecer permanentemente en el centro.

Por esto, piden al consistorio una "mayor implicación" en la eliminación de obstáculos urbanos, al margen de que considere la posibilidad de ubicar una parada de autobús adaptada, como hizo el año pasado el Consell de Ibiza ante la Residencia Can Raspalls.