Un año más, los gritos e insultos entre los españolistas y los independentistas ensombrecieron la ofrenda floral en honor a Jaume I, que se celebró ayer por la tarde en la plaza de España. La tensión no fue más allá del cruce de palabras y provocaciones, pero se mantuvo viva durante todo el acto, hasta tal punto que el concierto de la Banda de Música, que tocó mientras los representantes de distintas entidades iban llegando, fue casi imperceptible.

Frente a la estatua de Jaume I hubo dos bandos separados por un gran pasillo por donde desfilaron hasta 36 entidades, partidos e instituciones con sus adornos florales, muchos más que el año pasado. Una treintena de policías nacionales y locales permanecieron vigilantes en la misma plaza durante todo el homenaje.

A un lado, mucho antes de que comenzara la ofrenda, un grupo de personas ya exhibía banderas españolas y baleares, además de pancartas en las que reivindicaban la españolidad y rechazaban la pertenencia a los Països Catalans. En el otro bando, poco a poco, fueron posicionándose independentistas, también con sus banderas.

A los gritos de "Yo soy español, yo soy mallorquín" que proferían unos, los otros respondían "Som mallorquins, no espanyols" y "Fora, fora la bandera espanyola". Las provocaciones continuaron y los simpatizantes de Vox, Sumam y Foro Baleares gritaban "Puigdemont, a prisión", mientras los catalanistas les llamaban "fascistas".

Hubo aplausos y abucheos a partes iguales para quienes pasaban con su ofrenda exhibiendo banderas, algunos de ellos alardearon ante 'los contrarios'. También exaltaron los ánimos la llegada de Jorge Camposrepresentantes de Actúa-Vox; la de Miquel Ensenyat, presidente del Consell, al igual que la de los consellers Vicenç Vidal y Bel Busquets, además de la del resto de cargos políticos miembros de Més que acudieron a esta ofrenda.

La corporación municipal, encabezada por el alcalde, Antoni Noguera, llegó procedente de la parroquia de Sant Miquel, donde habían asistido al Cant de la Salve a la Mare de Déu de la Salut.

Ayer, las conselleras de Ciudadanos en el Consell anunciaron que no participarán hoy en la comitiva hacia la Seu como protesta por el cambio de fecha de la Diada de Mallorca, que reivindican que vuelva a ser el 12 de septiembre.