El ayuntamiento de Palma aplazó ayer tres desalojos y los derribos de esas casas en Son Banya debido a que las familias no disponían de alternativa.

En vista de que había mujeres embarazadas y otras circunstancias familiares, Cort accedió a aplazar esos tres desalojos hasta que se encuentre "una solución" social, ya el próximo año.

Así, de los cinco derribos previstos ayer, los últimos de este año, solo se ejecutarán dos, confirmó ayer Bienestar Social.

Hasta el momento, se han reubicado 25 familias que disponían de vivienda propia, cinco han sido realojadas por el Ayuntamiento, seis están pendientes de casa, dos han rechazado una vivienda y otras tres han acordado sumarse al plan de ayudas pese a no tener orden judicial de desalojo.