La concejalía de Ecología, Agricultura y Bienestar Animal prevé reducir el próximo año la factura de la incineración de residuos sólidos urbanos en 2,5 millones. De esta forma, en los presupuestos de 2016, en el apartado de tratamiento de residuos sólidos urbanos, se consigna una partida de 24,3 millones, mientras que en la del presente año había 26,8 millones. Tal como explicó la teniente de alcalde Neus Truyol en la comparecencia en comisión para explicar las previsiones presupuestarias de su departamento, esta disminución se debe a que se prevé un incremento del reciclaje, lo que posibilitará que se lleven menos toneladas a la incineradora de Son Reus.
Truyol recordó que, en solo dos años, el porcentaje de reciclaje ha pasado del 14% al 25% y se prevé que, con los nuevos contenedores de materia orgánica, cuya implantación en fase piloto se inicia el próximo lunes, aumente más. Para 2019 el área dispondrá de un presupuesto de 39,3 millones, un 0,9% más que en 2018.
Se ha incluido una partida de 15.000 euros para elaborar un nuevo Plan de Acción contra el cambio climático en el que se revisarán las actuaciones previstas en materia contra incendios, inundaciones, y olas de calor, entre otras.
El servicio de salvamento y socorrismo de las playas se incrementa en un 15% para mejorar las condiciones del personal.
Más control de los caballos
Por su parte, en Bienestar Animal se incrementará el servicio de asistencia técnica para el control de los caballos de las galeras, lo que supondrá la realización de más controles y de mayor calidad, además de formar a los agentes de la Policía Local.
El presupuesto de Modelo de ciudad sufre una disminución del 7,6% pasando de 16,8 millones a 15,5. Este descenso se debe a que el próximo año no se prevén más expropiaciones y porque los proyectos del Plan Litoral de Ponent, subvencionados en un 50% por la Unión Europea, se han repartido por otras áreas. Al respecto, el teniente de alcalde José Hila manifestó que se habrán ejecutado obras por un importe de un millón. Explicó que se prioriza la redacción del proyecto de s'Aigo Dolça, el de viviendas sociales de Cala Major y la actuación prevista en el solar del antiguo Zivago. Las subvenciones al alquiler de viviendas para jóvenes se duplican pasando a 500.000 euros, porque se posibilita que también puedan pedir ayudas personas mayores, y se incorpora una partida de 100.000 euros para la redacción del Plan Especial del Camp Rodó.
