P ¿También se jubila de la política?

R No. No puedo. Estoy enganchado.

P ¿Se volverá a presentar a algún cargo?

R De la política local y autonómica he cogido un distanciamiento saludable y ahora me muevo dentro del ámbito de Izquierda Unida Federal.

P ¿Ocupando algún cargo?

R No, no. Estamos en contacto una serie de personas de todo el Estado y hacemos manifiestos, ponemos en común preocupaciones y procuramos que todo vaya lo mejor posible, pero descarto el retorno a la política institucional. Esta etapa está definitivamente cerrada.

P ¿Cree que fue una buena fórmula que compartieran alcaldía PSOE y Més en Palma?

R Fue una novedad en Palma, aunque esta fórmula se había utilizado profusamente en distintos municipios. A mi no me acaba de convencer porque creo que se debe hacer una lectura de los resultados electorales en cada circunscripción, sin cambalaches ni quinielas. Por otra parte, traduce una idea de que estamos más por ocupación de parcelas de poder que por programas. Si llegas a un acuerdo de gobierno debería ser irrelevante quién es el alcalde.

P De su paso por el Ayuntamiento, ¿de qué hecho o actuación tiene un mejor recuerdo?

R Sin falsa modestia, hago un balance positivo. Llevé tres áreas importantes y estoy básicamente satisfecho. Se impulsó la participación, se incrementaron mucho los servicios sociales y, en el Imfof, en su última etapa después de romper con UM, dimos estabilidad laboral a las personas que desde hacía muchos años estaban como interinos. Sin sacar el botafumeiro, creo que se hicieron muchas cosas. Y el Atià Foc me encantó, pese a las críticas que cosechó.

P ¿Y de su etapa como conseller de Trabajo?

R Lo mejor, con diferencia, fue que conseguimos invertir la tendencia de la siniestralidad laboral. Éramos la segunda comunidad con más siniestrabilidad y en la que más aumentaba. Pusimos toda la carne en el asador y acabamos la legislatura con la curva invertida. Para ello, tuvimos que cambiar la cultura de la concienciación por la del cumplimiento de la normativa. Dijimos: las normas se deben cumplir y, quien no lo haga, zapatazo, como se hace cuando alguien aparca mal.

P ¿Y lo peor?

R No tuve el contacto que debía tener con los funcionarios que trabajaban en las concejalías. No cuidé suficientemente la proximidad ni la escucha. Estaba con mis líos, con mis dibujos estratégicos, con mis proyectos a corto, medio y a largo plazo y no cuidé el contacto personal con los funcionarios ni con los ciudadanos.

P ¿Se arrepiente de su apoyo a las obras del Palacio de Congresos cuando sus socios del PSM lo querían derribar?

R Cuando se ha realizado una gran inversión y ya hay una estructura física construida no es muy razonable ponerle dinamita. Pese a lo anterior, sigo pensando que su construcción fue una pésima decisión aunque, más allá de lo que a ti te parezca, si ya te encuentras con algo hecho con un coste brutal de posibles indemnizaciones no es razonable dedicar el dinero público a derribarlo.

P Inició el desmantelamiento del poblado de Son Banya y ahora se reanudan los derribos.

R Estoy preocupado porque estamos al final del mandato. Probablemente con la ejecución de estas sentencias se debería haber sido más diligente, aunque Mateo Isern se presentó a las elecciones en 2011 afirmando que continuaría con el desmantelamiento de Son Banya y, como siempre que el PP ha estado en el gobierno, lo paró y congeló. Tengo mis sospechas de por qué ello es así y lo he dicho muchas veces: hay un acuerdo tácito entre el mundo de Son Banya, o sea el mundo del narcotráfico, y el PP. Es un acuerdo no escrito, pero es así y que se traduce en la movilización de una parte importante del voto gitano organizado.

P ¿Lo anterior aún sigue vigente?

R No tengo pruebas de que esto haya cambiado. Si vuelve a ganar el PP veremos qué pasa. Lo cierto es que ellos siempre han protegido esta situación, para desgracia, fundamentalmente, de los niños que nacen en Son Banya. En todas las ciudades del mundo hay drogas y eliminando Son Banya seguirá habiéndolas, pero no tendremos un gueto racista generador de niños que se hacen mayores y viven en un mundo absolutamente desestructurado.

P ¿Se debería haber derribado el monumento de sa Feixina?

R Le contestaré con sinceridad. Creo que lo fundamental, lo imprescindible y aquello por lo que nosotros estuvimos peleando desde 1995, se hizo con Aina Calvo y Nanda Ramón, despojando al monumento de toda connotación franquista. Esto era lo esencial y se hizo. Dicho esto, respeto a quienes aún quieren derribarlo y a quienes lo quieren conservar, pero no me hace vibrar. Además le recuerdo que en el programa del Bloc no figuraba su demolición.

P Como funcionario, ¿cómo ha vivido el afloramiento de los casos se corrupción?

R Me alegro de que aflore. Me preocupa saber de dónde viene y desde cuándo pasa, porque ha sido una ciudad comandada por el PP durante la mayor parte del tiempo. Dicho esto, en este proceso de sacar a la luz estos casos de corrupción hay muchos funcionarios que han sufrido indebidamente, porque cuando el juez empieza a llamar y te imputa para proteger tus derechos, hay muchos funcionarios que han salido en los papeles que son de una absoluta probidad. Esto ha sido un precio muy duro que, como funcionario, he conocido de primera mano. Dicho lo anterior, me he alegrado del coraje policial y político para hacer aflorar todos estos casos.

P Colgó la bandera republicana en el balcón del Ayuntamiento y quitó el cuadro del Rey de su despacho de secretario del Parlament.

R Y se organizó un pequeño escándalo nacional, Aznar intervino, fui muy criticado por Francisco Umbral y el tándem Cirer-Rodrigo de Santos me llevó a los tribunales. Se provocó un cierto revuelo y nada más.

P ¿Percibe el peligro de la catalanización de la política balear?

R Las cuestiones territoriales no me preocupan, me preocupa la gente que está dentro de los territorios. Veo el proceso independentista con respeto pero con desapego, porque no me da ninguna garantía de que los catalanes ni los españoles vayan a vivir mejor. Además, se tendría que plantear después de que haya una voluntad mayoritaria y explícita. No creo que haya posibilidades de implementar el proceso en Balears, porque si los independentistas no han conseguido ser mayoría en Cataluña, cómo van a serlo aquí.