Diario de Mallorca

Diario de Mallorca

Contenido exclusivo para suscriptores digitales

Palmario

Noguera: "Hoy no hablaremos de quién es más mallorquín"

El afilador Francisco Campos en Santa Eulàlia. j. C.

El alcalde de Palma, Antoni Noguera, y la delegada del Gobierno, Maria Salom, desvelaron ayer que, cuando tomaron posesión de sus cargos, hicieron un pacto: que sus diferencias políticas, que las hay y son muy profundas, no les impidiera trabajar, cada uno en su ámbito y desde su responsabilidad, para garantizar la seguridad. Ayer lo cumplieron y ninguno de los dos quiso hacer declaraciones relacionadas con los recursos interpuestos por la Delegación contra el uso del catalán en ayuntamientos o contra la carrera profesional, lo que ha provocado que los funcionarios municipales no cobren este plus desde el pasado mes de marzo. Noguera elogió y agradeció la labor realizada por las fuerzas y cuerpos de seguridad del Estado en los últimos meses en materia de lucha contra el narcotráfico, tanto en Son Banya, como en las barriadas de Son Gotleu o la Soledat, algo que Salom también agradeció. El alcalde echó un capote a la delegada cuando, ante la insistencia de los periodistas, zanjó la cuestión afirmando que "en el orden del día de la reunión de hoy (de la Junta Local de Seguridad, organismo que copresiden) no estaba ni la carrera profesional ni quien de los dos es más mallorquín o más antimallorquín", en referencia a sus declaraciones en el sentido de que la Delegada había iniciado una carrera con Ciudadanos en cuestiones lingüísticas, rechazadas por Salom como "peligrosas", ya que podían incitar al odio.

Pastor, como pez en el agua

Quien estaba ayer cómoda y como pez en el agua al término de la reunión de la Junta Local de Seguridad, era la concejala de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, quién pudo restregar a la delegada que la Policía Local ha iniciado este año el refuerzo estival nada más y nada menos que hace un mes y medio y que, además, cuenta con una media de 12o agentes al día, lo que supone 28 más que el año pasado.

Un afilador en la plaza de Santa Eulàlia

Y sin que tenga nada que ver este comentario con lo anterior, Francisco Campos Torres, uno de los tres afiladores de cuchillos que aún quedan en Palma, continúa a sus 70 años al pie del cañón dando servicio a su fiel clientela de siempre, tal como hizo el pasado viernes en plena plaza de Santa Eulàlia.

Compartir el artículo

stats