La organización Mallorca Blue ha denunciado la contaminación en el litoral de Palma, ayer en concreto en la Playa de Can Pere Antoni, salpicada de residuos contaminantes. Desde toallitas higiénicas de vertidos fecales tiradas al W.C., residuos fecales solidificados, a plásticos de las rieras de vertidos al mar procedentes de las basuras. Escorias, plásticos quemados con más de tres meses en el mar, que han sido traídos por las olas.

Frente al Palacio de Congresos, al hotel, que se enseña como la imagen del gran destino turístico que es Palma, la playa es una "cloaca". Y como Mallorca Blue asegura: "Lo peor no es lo que se ve, sino lo invisible", esos millones de partículas que contaminan la bahía de una de las ciudades europeas más visitadas por los turistas.