La sede de la Fundació Turisme Palma de Mallorca 365 se trasladará en un par de meses al Quarter d'Intendència, junto a la sede de Palma Activa. Las actuales dependencias de la fundación son de alquiler y Cort quiere ahorrarse el arrendamiento, que es uno de los más caros que paga la corporación municipal en proporción a los metros cuadrados que tienen las oficinas. El tripartito culminará así un proyecto iniciado en el pasado mandato por el equipo de gobierno del PP.
El Ayuntamiento ahorrará más de 31.000 euros anuales cuando deje de pagar el arrendamiento de los despachos situados en la planta principal del edificio de la calle de la Victòria, número 2.
El arrendamiento del inmueble fue contratado cuando Joana Maria Borràs, una independiente que fue en las listas del PSOE, era regidora de Turismo. Las oficinas de 265 metros cuadrados se pagaron a razón de 2.900 euros al mes (IVA incluido), es decir, casi 35.000 euros anuales.
Cuando entró el pasado equipo de gobierno del PP, intentó rescindir el contrato para ahorrarse el alquiler. Pero el acuerdo alcanzado con los propietarios del edificio estaba blindado, lo que implicaba que no se podía romper el acuerdo antes de la fecha límite: el 31 de mayo de 2015.
Los populares consiguieron negociar a la baja el precio de la sede y desde entonces Cort paga el 90% del precio original. El alquiler actual asciende a 31.320 euros anuales.
El edificio de la calle de la Victòria data de 1862 y destaca por su arquitectura interior. Los techos altos y decorados son uno de sus principales atractivos, un elemento que impresiona a los empresarios y visitantes de la fundación turística.
Cort quería que la nueva sede del organismo también permitiera acoger reuniones al más alto nivel. Durante 2014 y 2015 trabajaron para adecuar un espacio en la segunda planta del edificio de Cort, junto al reloj d'en Figuera. Antes del traslado esas dependencias necesitaban de una reforma. Se prorrogó el alquiler durante siete meses, hasta finales de 2015. Sin embargo, el gobierno de Mateo Isern no dispuso de dinero para completar la reforma y ejecutar la mudanza. Tras el cambio de mando, el tripartito descartó el espacio por ser demasiado pequeño.
El equipo de gobierno actual ha tardado varios meses en decidir la nueva ubicación de la fundación turística. Ha alargado el contrato de alquiler por segunda vez durante un par de meses más hasta que se adapte un espacio junto al Quarter d'Intendència que hasta ahora estaba cedido al Govern balear.
Las oficinas presentan humedades, por lo que aún no están listas para el traslado de los trabajadores de la fundación turística, según explicó la concejala de Turismo, Juana Maria Adrover (PSOE). Las obras de adecuación se ejecutarán con carácter de urgencia para trasladar a los trabajadores hacia Semana Santa.
