El nuevo organigrama de la Policía Local, aprobado ayer en junta de gobierno, pretende potenciar la unidad de proximidad -en la que se incluyen los agentes de barrio-, además de las secciones de la nocturna y de tráfico.

Las unidades de proximidad se incrementarán con cien agentes hasta conformar una plantilla de unos 260 policías, mientras que la nocturna estará integrada por 150 agentes, unos 40 más que en la actualidad. La nueva comisaría de tráfico y seguridad vial, que dependerá directamente de la prefectura del cuerpo, y que ha sido relegada en los últimos años a favor de las labores policiales más reactivas, también se potenciará. Se prevé prácticamente duplicar su actual plantilla, integrada por 22 agentes.

La concejala de Seguridad Ciudadana, Angélica Pastor, manifestó que se quiere lograr una policía más cercana al ciudadano y centrada en las competencias exclusivas de este cuerpo: el cumplimiento de las ordenanzas municipales y la regulación del tráfico, dejando como "residual" la atención a la seguridad ciudadana, competencia de otros cuerpos, como la Policía Nacional o la Guardia Civil.

Desaparecen del nuevo organigrama las unidades más conflictivas, como el Grupo de Actuación Preventiva (GAP), que pasará a ser un equipo de apoyo a los agentes de proximidad (ERAP). La Unidad de Intervención Inmediata (UII) y la Unidad de Seguridad Integral (USEI), potenciadas por el anterior equipo de gobierno del PP, se van a fusionar en una nueva Unidad de Intervención Policial y sus integrantes se van a reducir, puesto que se considera que los policías dedicados a las seguridad ciudadana son excesivos, así como su especialización.

Otra unidad que va a desaparecer, aunque no sus funciones, será la Patrulla Verde, cuyos agentes se integrarán en la de Vigilancia Medioambiental y de Control de Actividades. La concejala explicó que se va a proceder a modificar completamente sus protocolos y su forma de actuar para conseguir una uniformidad en su actuación y que pueda realizar un seguimiento eficaz de sus trabajos. Se establecerá un turno de día y otro de noche, para que sus mandos tengan un mayor control sobre el trabajo realizado.

Más eficacia contra los ruidos

Además, esta unidad se ocupará preferentemente del seguimiento de la ocupación de la vía pública y del control de las actividades de los establecimientos. Dejarán de acompañar a los celadores municipales, puesto que se considera que, en el caso de que sea necesaria la presencia policial cuando se proceda a la notificación de una paralización de unas obras, pueden actuar agentes de cualquier unidad.

El control de los ruidos, que generan numerosas quejas ciudadanas, pasará a depender más directamente de la Unidad Nocturna. Con este cambio se pretende que las quejas puedan ser atendidas de forma más inmediata.

Otra unidad que se suprime es la denominada de asuntos internos, creada también en el anterior mandato, parte de cuyas funciones han sido declaradas ilegales. No obstante, de la prefectura del Cuerpo, además del servicio de Análisis y Seguridad Policial, dependerá la Unidad de Auditorías Internas y Régimen Disciplinario, que velará para que "no haya lagunas al aplicar la disciplina", según Pastor.

Al respecto, la concejala manifestó desconocer si con la remodelación se atajará de forma definitiva la corrupción que afecta al Cuerpo y que se investiga bajo secreto de sumario por el juzgado de instrucción número 12, pero señaló que "se van a establecer controles que hasta ahora no hay y se va a hacer responsables a los mandos de lo que hagan sus efectivos". Según añadió Pastor, el organigrama contempla un modelo policial mixto entre el actual y el nuevo. Se crea un departamento de Seguridad y Transparencia, que servirá tanto para gestionar todo lo que afecta a los Recursos Humanos como para evaluar la gestión municipal del área de Seguridad Ciudadana.

El área ha asumido competencias de Función Pública, que serán gestionadas por un nuevo jefe de departamento, pendiente de nombramiento. Si en el modelo actual se potencia la denominada comisaría operativa, en el propuesto es la de Proximidad la que tendrá una mayor relevancia.

Pese a lo anterior, se mantienen las competencias en Seguridad Ciudadana y se crea la comisaría de Soporte Operativo con el fin de dar apoyo a la labor realizada por los agentes dependientes de la de proximidad.