PSOE, Més y Som están de acuerdo en que el próximo sábado Palma cuente con un alcalde progresista. Saben que, para ello, los tres deben ponerse de acuerdo al menos en apoyar a un único candidato, puesto que, para ser proclamado alcalde, necesita en primera votación obtener mayoría absoluta; en el caso de Palma, quince de los 29 concejales que conforman el Consistorio.

Pese a las dificultades y a que, como es evidente, finalmente han surgido los problemas que se querían evitar desde el principio en el sentido de que el pacto de izquierdas no se circunscribiera a un simple baile de cargos y sillas, las negociaciones no están rotas y van a continuar hoy.

Según el candidato del PSOE a la alcaldía, José Hila, "el único escenario cerrado es que el próximo sábado la candidata del PP, Margalida Durán, sea proclamada alcaldesa por encabezar la lista más votada". Pese a que aún se está lejos de alcanzar un acuerdo -el programático está cerrado desde el jueves de la semana pasada-, se ha avanzado en relación a la situación planteada el pasado viernes cuando las negociaciones se paralizaron por plantear el PSOE su opción a que su candidato debía ser el alcalde por encabezar la lista más votada de entre los de las formaciones que quieren pactar.

El lunes la asamblea ciudadana de SomPalma despejó varias dudas, entre ellas que el partido hermano de Podemos no va a aceptar entrar en un gobierno municipal presidido por un socialista, una decisión que ha sido considerada por el PSOE como "un veto" inaceptable a su candidato. Pese a lo anterior, las negociaciones siguen en pie hasta el punto de que Som estaría dispuesto a aceptar un gobierno tripartido con una alcaldía rotatoria entre Més y el PSOE, una opción que ocupa, no obstante, el tercer puesto entre las mejor valoradas por los socialistas.

En este sentido, indicaron que su Consell Polític ha priorizado "el criterio de coherencia y de confianza", que necesariamente debe existir entre los integrantes de un equipo de gobierno.