Normalidad en Puerto Rico

Ni una valla ni la señal de prohibido aferrada a ella disuadieron a numerosos vehículos de acceder a la calle Puerto Rico desde la avenida Mèxic como ha sido habitual hasta ayer, cuando entró en funcionamiento la reestructuración de las vías de conexión entre la autopista y el Polígon de Llevant. Con todo, la normalidad fue la tónica: ni atascos, no bocinazos ni accidentes. Eso sí, algún que otro volantazo para no entrar en la calle y evitar el topetazo con la valla de plástico. Sin embargo, fueron mayoría los que acabaron ignorando la prohibición y entraron a Puerto Rico como siempre, desde la avenida de Mèxico.

"Vivo en Austria y no tenía ni idea de este cambio. Vengo a ver a mi madre y siempre he entrado por aquí", señaló J.A.P. Otros, conocedores del barrio, aparcaron en las cercanías y accedieron al centro de salud Emili Darder caminando. Se dio la circunstancia de que incluso un chófer de Emaya eludió la prohibición.

El acceso único a Puerto Rico se hace desde la calle Brotad y la antigua Callao. Con esta restricción se inicia el cambio circulatorio en el Polígon de Llevant que entrará en vigor a partir del día 24 según el cual Puerto Rico absorberá parte del tráfico que entre en el polígono a través de la autovía.