Sólo el escudo preconstitucional permanecía ayer en pie en lo alto del monumento de Sa Feixina. Las letras fueron borradas paulatinamente entre la llovizna de la jornada. La arenga "Viva España" fue la primera en volatilizarse entre golpes de compresor. Los sucesivos renglones se fueron esfumando uno tras otro para ejecutar el decreto del Ayuntamiento de Palma.

A partir de las nueve de la mañana, los operarios tenían todo dispuesto para acometer la tarea de borrar los relieves con 62 años de historia. Las letras de tres centímetros de espesor cedieron bajo el empuje del compresor.

Las tareas de reciclaje del monolito dedicado a las víctimas del crucero Baleares se hicieron al alimón. Por un lado, los técnicos de las contratas Bartolomé Ramon se encargaban de picar la piedra. Por otro, operarios de Calizas Mallorca S.A. se encargaron de allanar el monumento.

El resultado superó las expectativas más optimistas. En un principio, la principal preocupación estribaba en comprobar si los vestigios de las antiguas letras pervivirían sobre la piedra de Santanyí. No fue así. Al pulir la piedra y rebajar su volumen, los restos de las letras desaparecieron.

Sobre las 16.00 horas, toda la antigua leyenda en el controvertido monolito de Sa Feixina había desaparecido. "El resultado ha sido mejor de lo esperado. No queda ni rastro de las letras", se ufanaba el trabajador de la contrata.

Ahora los técnicos municipales de Infraestructuras tienen la última palabra. El dilema que se plantea después de esta primera actuación es si instalar un nuevo lienzo de piedra de Santanyí o si por el contrario es preferible trabajar sobre la antigua piedra. La primera conclusión que se extrajo a pie de obra era que el estado de la piedra del monumento de Sa Feixina es excelente.

La ausencia de incidente alguno fue también significativo durante la jornada de reconversión del monolito. Los operarios de las dos contratas trabajaron ayer sin injerencia alguna. La lluvia aislada tampoco contribuyó ayer a echarse a la calle.

"No veo por qué había que tocarlo. Aquí murieron muchos chavales del barrio en el barco y es bueno que la gente joven conozca algo de Historia", aseguró ayer José Luis, un profesor de instituto, después de ver el resultado de la primera actuación en el monumento de Sa Feixina.