La alcaldesa, Aina Calvo, está metida de lleno en la vorágine navideña, que incluye la visita de la máxima autoridad municipal a todos los centros de trabajo. El lunes felicitó las fiestas a los medios de comunicación, con la sonada ausencia de su socio Miquel Nadal por no haberle invitado, según la versión del que hoy será probablemente nuevo presidente de UM. El jueves, aprovechando la celebración de la gerencia de Urbanismo, felicitó las fiestas a los trabajadores del edificio Avingudes. Ayer visitó Emaya y los mercados municipales de Llevant, el Camp Rodó y Pere Garau. Tras un respiro con los medios de comunicación en el que les comunicó el acuerdo alcanzado con el hotel del palacio de congresos prosiguió su periplo visitando los mercados de Santa Catalina y Pere Garau. El lunes a primera hora tomará un chocolate con los funcionarios de Cort.
Agenda apretada
y difícil de cumplir
Como se puede apreciar, la agenda de la alcaldesa es muy apretada. A los actos y visitas anteriores hay que añadir las comidas y encuentros que no se hacen públicos con distintos colectivos y personajes. De esta forma es más fácil comprender los continuos retrasos con los que acude a las citas previamente concertadas, que ya se están convirtiendo en una constante.
Ponsetias peligrosas para la salud
Pese a las reiteradas denuncias sobre los efectos perniciosos sobre la salud de la concentración de ponsetias, el Ayuntamiento reincide y reparte masivamente esta planta típicamente navideña. Mientras, en el PP, el adorno navideño luminoso colocado en el acceso a las dependencias del grupo es ampliamente comentado.
