Lo que hoy es el conjunto de las estaciones del ferrocarril de Sóller y del tren de Inca-sa Pobla formaron lo que es el barrio de l´Arxiduc Lluís Salvador, que se extiende hasta el de Bons Aires. El barrio de l´Arxiduc tiene dos vías neurálgicas: la de Eusebi Estada y la que recibió su nombre. En medio se encuentra la plaza principal de esta zona, la del Cardenal Reig, rematada por un obelisco que se encuentra incluido en el catálogo de elementos a proteger. Es uno de los puntos neurálgicos del barrio de l´Arxiduc e, incluso, de esta amplia zona del Eixample palmesano.

El barrio de l´Arxiduc Lluís Salvador creció en una zona que se encontraba surcada por varios de los caminos que surgían de diversos puntos de las murallas medievales de Palma. Antes de que se iniciara el derrocamiento de las murallas de la ciudad, se instala la estación del tren, que unía Palma con la industriosa Inca, en la zona más próxima a la actual Plaza de España de lo que, con los años, se convertiría en un nuevo barrio ciudadano. La inauguración se realizó en 1875 y por su situación estratégica, esta zona se convirtió en el punto de partida de las líneas férreas a Santanyí, Sineu, sa Pobla y Manacor. A partir de 1960, con la rápida motorización tanto de transportes como de ciudadanos particulares, se fueron eliminando líneas de ferrocarril, quedando sólo en activo las de Inca y Sóller.

Entre los edificios catalogados conservados en el barrio de l´Arxiduc destaca el inmueble de la estación del ferrocarril de Sóller, obra del arquitecto Gaspar Bennàssar. También es obra de este representativo arquitecto mallorquín el puente del tren de Inca. Se trata de una pieza catalogada que necesita ser restaurada a fondo tras años de abandono y de haber sufrido deterioros a causa de golpes de vehículos.

Otra de las calles principales de este barrio es la de 31 de Desembre, en la que aun se mantienen varios edificios de estilo modernista. Tampoco faltan diseños racionalistas en esta zona del Eixample de Palma, como una serie de edificios del arquitecto Pellicer situados en los inicios de la calle Eusebi Estada. En realidad, este barrio reúne una serie de edificios de diversos estilos arquitectónicos importantes, en el que dominan los bloques de viviendas. Sus principales calles mantienen un importante tejido comercial.

Ante el auge urbanístico del barrio de l´Arxiduc, a partir de la posguerra, ante el aumento de su población, se inaugura en 1962 la parroquia de La Encarnació. En sus inicios se convirtió en uno de los pocos focos de progresismo de la isla. De un tiempo a esta parte, esta neurálgica zona de la ciudad se ha convertido en asentamiento de inmigrantes de diversos puntos del globo.