El grupo parlamentario de Esquerra Unida-Els Verds considera que la intención de interrumpir el servicio del tren en el tramo desde Son Rullan a la plaza de Espanya durante dos años por la ejecución del proyecto de soterramiento de las vías del tren supone condenar a muerte a este servicio y afecta a sus perspectivas de utilización en el futuro.

Según este grupo político, las soluciones técnicas existen y dependen de la voluntad política por lo que habría que replantearse el proyecto inicial. Además creen que la calle Jacint Verdaguer no ha de ser una vía para el coche privado. Por ello, proponen que debe ser un bulevar peatonal, un espacio libre público para los vecinos con carriles para el transporte público.

EU-EV pide que se replanteen las dimensiones y características de la estación pues consideran que el transporte público necesita una estación para la llegada de los trenes y no una gran estructura con galería comercial.