TRIBUNA

Nuevas formas de financiación: un Instituto de Finanzas y Crédito

Otra de las propuestas es contactar con empresas de capital riesgo, en España hay más de 400 empresas registradas en la CNMV, de carácter privado, para realizar esta actividad

Ilustración: Nuevas formas de financiación: un Instituto de Finanzas y Crédito

Ilustración: Nuevas formas de financiación: un Instituto de Finanzas y Crédito / Ingimage

Lluís Ramis de Ayreflor

Lluís Ramis de Ayreflor

En varias ocasiones, me he expresado de forma clara en cuanto a que es necesario facilitar nuevas figuras o alternativas de financiación, especialmente, si en nuestra comunidad queremos potenciar la creación de riqueza con emprendedores, autónomos, o microempresas. Son necesarias nuevas figuras para apoyar a los emprendedores que tienen proyectos creativos o innovadores, pero que, al estar empezando, no cuentan con capital.

Para conseguir el dinero necesario para invertir en la plasmación de un proyecto emprendedor, la financiación tradicional de préstamos no siempre es posible por la falta de garantías reales que se exigen por parte de la banca, al no disponer ya de una cuenta de resultados que demuestre la capacidad de retorno del préstamo.

Ante ello, hoy presento otras alternativas.

Una es contactar con empresas de capital riesgo. En España hay más de 400 empresas registradas en la CNMV, de carácter privado, para realizar esta actividad, y generalmente están especializadas por actividades, de forma que conocen muy bien sectores concretos para poder analizar proyectos en general innovadores, y apostar por los mejores en función de su experiencia. Son los que producirán alta rentabilidad a corto plazo y ese es el principal objetivo del inversor.

El registro de empresas de capital riesgo es público, por lo que cualquier emprendedor puede buscar en las páginas de la CNMV para dirigirse a alguna de ellas. Desgraciadamente se concentran en Madrid, en segundo lugar están en Barcelona y País Vasco, y casi no hay en Baleares, por lo que siempre es más difícil la interlocución y el conocimiento de la economía local.

La otra propuesta, más amplia y con una finalidad no solo de rentabilidad, y que es la gran apuesta en muchas comunidades autónomas, es crear su propio Instituto de Crédito y Finanzas. Por ejemplo, citamos la Región de Murcia, Comunidad Valenciana, Cataluña, Castilla la Mancha, Cantabria, entre otras.

Los objetivos de todos estos entes públicos siempre son los mismos: unos pueden ser internos de la administración autónoma para una gestión más profesionalizada e independiente para obtener fondos en su financiación; y el segundo y básico es el de apoyar a emprendedores, autónomos y empresas en sectores estratégicos o con finalidad especial para la comunidad.

Crear este instituto en nuestra Comunidad Autónoma sería contar con un ente público especializado en la gestión financiera que tendría como objetivo fomentar la cultura emprendedora, crear y mantener empleos de calidad y hacer llegar recursos financieros a personas o empresas, donde las entidades financieras clásicas no llegan.

Pasemos a analizar qué líneas principales hay que establecer para cumplir estos objetivos:

Creación de emprendedores, con apoyos de préstamos participativos, única forma de dar músculo financiero a las buenas ideas empresariales que surjan, pero que no cuentan con recursos propios.

Tener una sociedad de «capital riesgo, pública o mixta» para promover y participar en sociedades con el fin de incrementar la oferta de capital para las empresas, complementando al sector privado y multiplicando los recursos que se destinan a proyectos de las Illes Balears, en sectores que sean estratégicos como el tecnológico, innovación, medio ambiental, o de economía circular.

El objetivo de esta línea es contribuir al crecimiento de las empresas, desde sus principios, a su consolidación, e incluso internacionalización.

Colaborar con Isba SGR en la concesión de avales del 100% al préstamo que, por su finalidad o las características de los solicitantes (jóvenes, segunda oportunidad), necesiten tratamientos especiales.

Línea de ayudas y financiación para la compra o alquiler de viviendas para jóvenes o viviendas sociales. Uno de los principales problemas de los ciudadanos de Baleares es el acceso a la vivienda, con un Instituto Financiero y de Crédito público se podría actuar de forma eficaz para aliviar sustancialmente el problema.

La experiencia y detalles de funcionamiento están experimentados ya en las citadas comunidades autónomas, de distinto signo político, y en Baleares hay personas preparadas y con la experiencia profesional que exige el Banco de España para llevarlo adelante.

Una vez más, si queremos que algo cambie, hagamos cosas diferentes. Todos los gobiernos quieren apoyar a los emprendedores o facilitar el acceso a la vivienda, pero no podemos hacer lo mismo de siempre porque conocemos los resultados. Exploremos y estudiemos nuevas alternativas en bien de los ciudadanos.