El skater mallorquín Jaime Mateu, décimo con 69,18, no pudo meterse en la final de los Juegos de Tokio de skateboard en categoría 'park', en la que el australiano Keegan Palmer se convirtió en el primer campeón olímpico de la disciplina. El mallorquín se puso tercero tras la segunda carrera, pero su 69.18 en la tercera, con su mejor marca, no le bastó para acceder a la lucha por las preseas. Así, concluyó décimo.

El sueño olímpico del skate español se quedó a las puertas de luchar por las medallas. Los 72,24 puntos del otro representante español Danny León en su segunda ronda, con un complicado salto sobre el banco exterior de la pista, le mantuvieron en los lugares de privilegio hasta el último momento, cuando el estadounidense Cory Juneau se lo arrebató por 0,76 de diferencia. Tampoco pudo Jaime Mateu, que tras dos caídas cuadró un ejercicio de rabia en su tercer intento para ser décimo (69,18).

Un estreno de categoría para los representantes españoles de una disciplina que ha entrado con fuerza en los Juegos Olímpicos. Si la final femenina de 'park' copó titulares por la juventud de sus ganadoras -19 años de la campeona japonesa Sakura Yosozumi, 12 de la nipona Kokoka Hiraki, plata, y 13 de la británica Sky Brown, bronce-, en la masculina ofreció un espectáculo de gran calidad y emoción, en el que se impuso el australiano Keegan Palmer (18 años).

Danny León y Jaime Mateu entraron en escena en la segunda manga. De negro el mostoleño pese al inmisericorde sol que caía sobre el centro de deportes urbanos de Ariake, y de rojo el mallorquín salieron a practicar en cuanto acabó la primera manga. Motivados, sonrientes, Jaime golpeó la tabla contra el suelo al ser presentado. Se abrazaron, sonrieron a cámara. Estaban en los Juegos Olímpicos.

El arranque no fue fácil: a la primera Danny deslizó su tabla sobre la repisa de la isleta central, pero perdió la tabla en la caída. La especie rumba, un remedo del 'Obí, Obá' que pusieron en la megafonía cuando salió a competir Jaime Mateu, tampoco dio suerte al segundo español, que comenzó con confianza, pero cayó.

A la segunda vendría la buena para León. Voló en su primer salto sobre el borde del 'bowl', repitió el truco sobre la isleta central, pero aún tenía más: se fue al por el banco del exterior y apoyó la tabla sobre él con tanto éxito como riesgo. El poco público -otros 'skaters', atletas, prensa y voluntarios- aplaudió, y León levantó el puño. Los 72,24 puntos le colocaban como primero provisional. Mateu seguía sin encontrarse y volvió a caer.

En busca de más, León volvió al banco en su tercera manga, pero esta vez no salió y cayó al suelo. Sabía que la segunda ronda era buena y acabó enviando besos a la pantalla, que mostraba en vídeo a su familia y amigos en España siguiendo su actuación.

Jaime Mateu sí que cuadró su tercera ronda. Salió con velocidad, deslizó la tabla por los bordes del 'bowl' y levantó el puño en señal de liberación. Una puntuación de 69,18 le metía en la pelea como segundo provisional. "Os quiero a todos", gritó con rabia al monitor en el que aparecían sus seres queridos, especialmente su abuela. "La abuela estaba más orgullosa de que estuviera aquí que yo mismo", reconocería después a los medios en la zona mixta.

Ya solo les quedaba esperar. El brasileño Pedro Quintas, de su misma ronda, los superó a ambos. En la tercera ronda se metieron el tercero del mundo, el brasileño Luiz Francisco, el australiano Kieran Wooley, que acabaría siendo campeón mundial pero en la preliminar le dio un buen susto a uno de los cámaras de televisión, al que se llevó por delante en uno de sus saltos en el borde del parque.

El puertorriqueño Steven Pinero, el francés Vincent Matheron y el brasileño Pedro Barros, cuarto mundial y finalmente plata, se fueron colando por delante de León, que permanecía en el octavo puesto.

Sorprendieron las eliminaciones de los estadounidenses Heimana Reynolds, primero de la clasificación mundial y quizás afectado por estar en la primera manga, fuera de la final con unos discretos 63,09 puntos y su compatriota Zion Wright, quinto del mundo pero se quedó en 67,21 puntos, justo detrás del mallorquín Mateu.

Al cierre de la cuarta manga, León aguantaba en el octavo y último billete. El estadounidense Cory Juneau, segundo del mundo, amenazaba con una puntuación de 71,08, pero en su última actuación terminó cayéndose. Sin embargo, el resto del ejercicio sí mereció el premio de los jueces: 73 puntos, 0,76 mejor que la de León.

"Ya soñaba con hacer mi ronda en la final, tenía preparada alguna sorpresa", lamentó el mostoleño, satisfecho en todo caso por el papel realizado y por la visibilidad de su disciplina.

Jaime Mateu durante su participación en los Juegos. EFE

Igual de satisfecho e incluso acelerado salió su compañero Mateu. "Esto es el principio de mucho", recalcó. "El skate había sido un deporte callejero, de lo cual nosotros nos sentimos orgullosos, esto es bueno para todos los skaters, para los que les guste las Olimpiadas y para los que no, porque estamos enseñando a todo el mundo lo que es esto", apuntó el mallorquín.

Los competidores acabaron abrazados, animándose, disfrutando de una afición que no conoce fronteras. "No tenemos naciones, todos somos 'skaters', nos queremos, nos animamos. Hoy estábamos disfrutando del skate de todos", finalizó Mateu. Esta misma noche cogerán un avión rumbo a una competición en España, pero ya han vivido el sueño olímpico.

El campeón se impuso con un mejor ejercicio de 95,83 puntos al brasileño Pedro Barros, plata, y al estadounidense Cory Juneau, bronce.

Palmer dominó el concurso desde el inicio, con un primer ejercicio de 94,04 que mejoró en sus dos siguientes salidas, a mucha diferencia de Barros, cuya mejor presentación en sus tres intentos recibió 86,14. Juneau, que arrebató al español Danny León el puesto a la final con el octavo mejor puesto, logró el bronce con 84,13 puntos en su mejor presentación.

Con esta final termina el debut olímpico del monopatín, que más allá de Palmer ha tenido un acentuado protagonismo local: las otras tres categorías han tenido triunfos japoneses: Sakura Yosozumi en 'park' femenino, Momiji Nishiya en 'street' femenino y Yuto Horigome en 'street' masculino. 

El skater mallorquín Jaime Mateu. EFE