Agua de Coco, una fundación que lleva desde 1994 dedicándose a la cooperación internacional, a la sensibilización, la educación y el desarrollo, ha recibido esta semana la desinteresada contribución de Autovidal y Autocares Comas que se han encargado de llevar la felicidad a un grupo de 30 niñas provenientes de Madagascar que aterrizaron en Mallorca para conocer la isla y pasar aquí unos días, lejos de la cruda realidad de su país. Entre las diferentes actividades organizadas se incluyó la celebración de un divertido concierto de música gospel a cargo del grupo Malagasy Gospel.