Un masivo y cuestionado voto por correo alarga el recuento de las elecciones sindicales en el hospital de Manacor

Larga noche electoral en el hospital comarcal de Manacor por las suspicacias que provocó entre los diferentes delegados sindicales la aparición de 141 sufragios emitidos por correo, una cifra inusual para un centro de estas características, y que alargó el recuento definitivo hasta las cuatro y media de la madrugada de ayer jueves.

Algunos de los representantes contactados justificaron su sorpresa ante el elevado número de sufragios en que, por ejemplo, en el hospital de Son Espases, donde estaban llamados al voto más de 8.000 trabajadores de otros hospitales y los centos de salud adscritos al de referencia así como la gerencia del 061 y los empleados de servicios centrales, tan solo se registraron 19 votos por correo. O que en el hospital comarcal de Inca, centro sanitario que atiende a una población similar al de Manacor, tan solo se presentaran 4 sufragios de manera diferida.

Asimismo, de los 141 votos por correo finalmente solo fueron admitidos como válidos en torno a un centenar de ellos. El motivo es que detectaron varios casos de votantes que con una sola solicitud formalizada para votar por correo finalmente ejercieron su derecho hasta en tres ocasiones. Por ello se decidió aceptar únicamente el sufragio con la fecha más reciente.

Estos votos fueron los últimos en introducirse en una de las dos urnas que recogían los sufragios ante la negativa de la mesa de proceder a recontarlos aparte. Pero todos ellos quedaron encima de todo. Y en el recuento de los primeros 75 votos de esa urna el resultado fue el siguiente: 50 para UGT, 16 para el CSIF, 5 para CCOO, 2 para el SATSE y un voto para Simebal y USAE.

Esos cuestionados sufragios apuntaban a UGT cuyo secretario general, Miguel Ángel Romero, señaló que en el comarcal de Manacor hay muchos turnos laborales de 12 horas que libran al día siguiente y que era normal que estos trabajadores, para evitar desplazarse al hospital en su libranza, hubieran decidido votar por correo. En cualquier caso, animó a los escépticos con esta explicación a impugnar la votación en los tribunales.

Pero cuando menos es sospechoso que en una de las urnas, en la que se depositaron los votos por correo, UGT obtuviera cientos de sufragios mientras que en la otra su presencia fuera residual. Finalmente este sindicato empató a 4 delegados con Simebal frente a los 6 que obtuvo el SATSE en los comicios del comarcal.

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