Lío de médicos en el centro de salud de Casa del Mar en Palma

El centro de salud de Casa del Mar ha procedido a una serie de cambios administrativos y está volviendo locos a algunos de sus usuarios a los que ha cambiado de médico de cabecera sin informarles de la mudanza. Un cambio que ha acometido sin informar a los propios profesionales afectados, que ven con sorpresa e incredulidad como sus antiguos pacientes deambulan por los pasillos en busca de su nuevo facultativo y se enteran por ellos mismos de que ya no forman parte de su cupo de tarjetas sanitarias.

Este es un relato de los vericuetos por los que tuvo que transitar un usuario de este centro de salud la pasada semana. «Llamé a Infosalut Connecta un viernes y me dieron cita con mi médica el pasado miércoles a las 12 del mediodía. Me dijeron que acudiera a mi centro de salud», subraya a posteriori.

El día de la cita acudió puntualmente a la consulta y se encontraba esperando frente a la puerta cuando de otra dependencia adyacente salió una doctora que le preguntó a quién estaba aguardando. Cuando le dio el nombre de su facultativa le respondió que esa cita era imposible porque la citada profesional pasaba consulta por la tarde.

Ante su incredulidad, al facilitarle su nombre a la médica, esta le confirmó que tenía cita a esa hora, a las 12 del mediodía, pero en la unidad básica (UBS) dependiente de ese centro de salud ubicada en el hospital general y con otro médico que el usuario no conocía.

Tras solucionarle parte de los motivos de la consulta, el usuario abandonó el centro de salud escamado ya que a otra paciente que había coincidido con él ese día le había ocurrido exactamente lo mismo.

Al día siguiente volvió a llamar a Infosalut para averiguar los motivos del cambio. En la central le informaron de que desde el pasado 1 de mayo había quedado adscrito a la UBS del General debido a una redistribución de los cupos de tarjetas sanitarias asignados a cada médico del centro.

Al preguntar si podía volver a tener como médica de cabecera a la profesional que le había venido atendiendo los últimos años, le informaron que debía presentar una solicitud de cambio que, además, debía ser aceptada por la médica original. Un trámite que, le dijeron, se demoraría unos quince días. Ante ese escenario, decidió quedarse en manos de su nuevo médico de cabecera, al que aún no conoce.

Fuentes médicas de ese centro de salud confirmaron a este diario el baile de pacientes. Explicaron que debido a las obras que se acometieron en el hospital General en la pasada legislatura, se decidió trasladar a los dos o tres médicos de familia que pasaban consulta allí al centro de salud ubicado en el Moll Vell.

Ahora, una vez concluida la reforma y acabadas las restricciones de la pandemia de covid-19, estos médicos de cabecera han vuelto a pasar consulta en el General. A esta circunstancia se habría sumado algunas nuevas incorporaciones de facultativos que han decidido al Servei de Salut a variar los cupos de pacientes de los médicos del centro. El objeto de esta medida es distribuir más equitativamente el número de pacientes entre los médicos activos con el objeto de racionalizar y mejorar la calidad asistencial.

Lo que echan en falta los actores implicados, tanto médicos como pacientes, es que no se les informara previamente de los cambios que se les avecinaban. De hecho, al paciente que ha denunciado esta situación no se le comunicó en Infosalut ni que tenía la cita en otra unidad asistencial (el General en lugar de la Casa del Mar) ni que además le habían cambiado de médico.

Desde el Servei de Salut pidieron disculpas a este usuario por los inconvenientes que le hayan podido causar y justificaron los cambios de pacientes efectuados sin consultar al menos previamente a los médicos que les tratan porque una actuación así es materialmente imposible y se dilataría mucho en el tiempo.

Lo que sí llama la atención es que el IB-Salut no haya podido facilitar una cifra de los pacientes a los que han cambiado de médico, pese a haber realizado el trámite burocrático.

Sí informaron en cambio de los criterios seguidos para llevar a cabo la redistribución de cupos de pacientes entre los médicos de cabecera.

«Habitualmente se estructuran los cupos teniendo como referencia básica el criterio de la accesibilidad, es decir, zonificar las zonas en función de las calles o, dicho de otra forma, teniendo en cuenta la distancia que existe entre los domicilios de los usuarios y el dispositivo asistencial más cercano», explicaron

En el caso de la zona básica de salud Casa del Mar, la unidad asistencial de referencia es el centro de salud Casa del Mar, y de él dependen las unidades básicas de salud (UBS) de Centre (en el hospital General) y de El Terreno, situaron recordando asimismo que la de Centre tiene una limitación de espacio y de profesionales sanitarios que puedan trabajar allí, lo que conlleva aparejada una limitación de usuarios que podrían ser atendidos.

Lo más cerca posible

«Al llevar a cabo la redistribución de cupos se tuvo en cuenta principalmente el criterio de zonificación, es decir, que el usuario tuviera su dispositivo asistencial lo más cerca posible. Otro de los criterios que se tuvo en cuenta fue la armonización del número de pacientes que puede atender cada profesional, es decir, que los cupos fueran más o menos equilibrados con el fin de mejorar la atención que se ofrece al usuario», añadieron.

A la hora de llevar a cabo la redistribución también se tuvo en cuenta a la población mayor, más apegada normalmente a su médico de familia por el paso de los años y la frecuentación. Así, se respetó a los usuarios mayores de 65 años y también a la población de mayor complejidad de seguimiento, de manera que este sector de población ha mantenido a su profesional de referencia de origen, aseguraron.

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