Las residencias de discapacitados y de ancianos de Baleares, libres de mascarillas

Si un usuario presenta síntomas ha de llevarla en espacios comunes y sus cuidadores atenderle con cubrebocas| Médicos, enfermeras y farmaceúticos celebran el fin de la medida

Los usuarios de las residencias de ancianos y de discapacitados ya pueden ir sin mascarillas.

Los usuarios de las residencias de ancianos y de discapacitados ya pueden ir sin mascarillas. / Consell de Mallorca

I. Olaizola

I. Olaizola

El fin de la obligatoriedad de llevar mascarilla es una realidad desde ayer en los centros residenciales y para personas mayores gestionados por el Instituto Mallorquín de Asuntos Sociales (IMAS), explicó el departamento de Drets Socials del Consell de Mallorca.

En concreto, a partir de ayer se elimina el uso universal de las mascarillas en las residencias y centros de personas mayores y de personas con discapacidad, aunque se aconseja tomar precauciones adicionales si aparecen síntomas de la enfermedad, ya sea en usuarios, trabajadores o familiares, con el objetivo de evitar posibles brotes. En estos casos, se recomienda que la persona con síntomas recupere la mascarilla en los espacios compartidos y el uso por parte del personal cuando las tengan que atender.

En cuanto a los profesionales que atienden a personas usuarias que estén recuperándose de una estancia hospitalaria o que trabajan en unidades de cuidados intensivos en estos centros, se seguirán los protocolos marcados por los servicios de Medicina Preventiva y Prevención de Riesgos Laborales, según la valoración de cada caso.

Por otra parte, médicos, farmacéuticos y enfermeras se han congratulado del fin de su uso pero, eso sí, pidiendo a la población que actúe con sensatez. Desde el Colegio de Enfermería (COIBA) aseguraron que «celebramos que se dé por terminada la crisis sanitaria provocada por la pandemia y ahora especialmente pedimos que no se olvide todo lo que hemos aprendido. Por ello, creemos que es importante que tanto la población en general como los sanitarios tengamos en cuenta las recomendaciones publicadas sobre el uso de mascarillas y otras medidas higiénicas ante la presencia de síntomas de infección respiratoria u otras casuísticas descritas, especialmente cuando estamos en contacto con personas vulnerables».

Fumar en las terrazas, paso atrás de salud pública

Respecto al levantamiento de la prohibición de fumar en las terrazas, el COIBA lamentó que se vincule esta medida únicamente a la prevención de la pandemia. «Consideramos que es dar un paso atrás a nivel de salud pública e instamos a las administraciones a que promuevan espacios sin humo», concluyeron.

«En las farmacias entra todo el mundo, incluidas personas muy vulnerables. Espero que todo el mundo actúe con responsabilidad», reclamó el presidente del Colegio Oficial de Farmacéuticos de las Illes Balears (COFIB), Antoni Real.

Por su parte, el vicepresidente del Colegio de Médicos, Alfonso Bonilla, consideró que ante la notable bajada de la incidencia de los contagios ha sido «una medida lógica de tomar».

Antoni Real, de forma velada, instó a «seguir tomando una serie de precauciones» para evitar que se contagien personas vulnerables a los que el virus SARS-CoV-2 todavía podría causar graves problemas de salud. No obstante calificó de «buena noticia» la retirada de las mascarillas porque, en definitiva, supone el punto y final de una larga pandemia.

El doctor Bonilla matizó que a nivel hospitalario era una medida que tenía que llegar aunque manteniendo su uso en determinadas áreas como las UCIs o los hospitales de día que atienden a personas inmunodeprimidas. Él mismo, especialista otorrino que debe explorar las vías altas de los pacientes, aseguró que seguirá usándola durante su actividad asistencial.