El itinerario diseñado, a través del Consell de Mallorca, para el grupo de periodistas estadounidenses que han pasado esta semana en la isla muestra la esencia del destino que gustan escudriñar los clientes del segmento de lujo que nos visitan.
El viajero norteamericano «no está muy interesado en el sol y playa», dice Toni Ferrer. «Busca», continúa el director del GPRO Valparaíso, «descubrir» paisaje, naturaleza, la Serra de la Tramontana, la oferta patrimonial y cultural, el cicloturismo o la enogastronomía... Y ese es el menú de propuestas que han degustado los siete periodistas especializados en viajes (para medios como Forbes, CNN o National Geographic), según explicó Lucía Escribano, la directora insular de Turismo. Por ahí versó también la presentación que preparó el Consell para un seminario web organizado con United Airlines y Turespaña Nueva York el pasado jueves, por la ruta directa con la isla, al que se inscribieron unos 700 agentes de viajes.
Los reporteros han conocido los restaurantes Flanigan, de Puerto Portalls, y Bruno, de Port Calanova; navegaron en llaüt; participaron en un taller gastronómico en Es Forn de sa Llotgeta (donde cocinaron coca de verduras), en Palma; visitaron la Seu, el mercado del Olivar, los Jardines de Alfàbia, Sóller, Deià, Valldemossa, el Rafa Nadal Museum Xperience y la finca vitinícola Ses Talaioles, en Manacor, o Teixits Vicens, en Pollença. También han pasado por los hoteles Sant Jaume, St. Regis Mardavall, Belmond La Residencia, Sant Francesc, el Son Brull o el Illa d’Or. Todo un repaso a la oferta de alta gama de la isla, antes de partir el viernes hacia Menorca.
