El programa de detección precoz de cáncer de colon, uno de los tumores más letales en esta comunidad autónoma tras el de pulmón y que provoca alrededor de 350 fallecimientos anuales, se ha ampliado al 90% de la población diana (todos los ciudadanos/as con edades comprendidas entre los 50 y los 69 años) de las Islas.
A finales del próximo mes de marzo, explicaron ayer la consellera de Salud, Patricia Gómez, y el doctor José Reyes, presidente de la Asociación Española contra el Cáncer (AECC) en Baleares y coordinador clínico de este programa preventivo, se comenzarán a cursar invitaciones (cartas personalizadas) a todos los ciudadanos de las citadas franjas de edad de los sectores sanitarios de Ponent (que tienen Son Espases como hospital de referencia), Migjorn (Son Llàzter) y Llevant (hospital de Manacor) para que se sumen al programa de detección precoz.
El doctor José Reyes explicó que se comenzará con los de más edad (69 años) y se irá descendiendo paulatinamente hasta completar todas las cohortes en el plazo de dos años.
Como se recordará, en estos momentos está implantado en Ibiza y Formentera y en la sector de Tramuntana de Mallorca, esto es, la población adscrita al hospital comarcal de Inca. Estos sectores a los que sí se les está haciendo pruebas preventivas suponen tan solo el 23% de la población diana balear, recordó el doctor Reyes , que excluyó a Menorca por falta de sanitarios especializados para llevarlo a cabo.
Suspendido en Menorca
El también responsable clínico del programa recordó que pese a que el Mateu Orfila de Maó participó inicialmente en el programa de detección precoz, la falta de profesionales sanitarios especializados para llevarlo a cabo ha obligado a suspenderlo de manera temporal.
Durante lo que llevamos de pandemia, el hospital de referencia menorquín habría perdido hasta a cuatro digestólogos por lo que el doctor Reyes concluyó que «con la dotación actual (de personal para los cribados) no es realista plantear que se puedan incorporar (a la detección precoz)». De ahí que ayer se hablara de llegar al 90% de la población balear ya que se está excluyendo al 10% de los menorquines. El responsable clínico no descartó que, para evitar esta inequidad territorial y actuando como se ha hecho en otras ocasiones, especialistas de otras islas se desplacen a Menorca para recomenzarlo.
«Con esta detección precoz estaremos no solo evitando cánceres sino también diagnosticándolos en un estadio mucho más inicial y curable», recordó el doctor Reyes subrayando que a los 8 años de instaurados estos programas consiguen reducir entre un 25% y un 30% tanto la mortalidad como la incidencia de estos tumores.
Y también subrayó que se trata de una iniciativa coste/efectiva ya que, evaluó, mientras un tumor de colon detectado en su fase más avanzada cuesta tratarlo unos 150.000 euros a pesar de los cuales el desenlace suele ser el fallecimiento del paciente, uno en estadio 1 (el más inicial) cuesta abordarlo unos 20.000 euros y además con un elevado porcentaje de supervivencia de la persona que lo padece.
Por ello, el doctor Reyes animó a la población a participar en él sometiéndose a un test de sangre oculta en heces que, en caso de ser positivo, conllevará la realización de una prueba endoscópica más precisa, una colonoscopia. El especialista lamentó no obstante que en las zonas de Baleares en las que está implantado el porcentaje de participación entre un 30% y un 35%.
¿Cómo se hace?
Recoger el test en la farmacia y llevarlo a Primaria
Las personas que a finales del mes de marzo reciban una carta invitándoles a participar en el programa voluntario de detección precoz de cáncer de colon y decidan hacerlo deberán ir a una de las farmacias asociadas para recoger el kit del test de sangre oculta en heces en el que deberán recoger parte de una deposición y llevarla a su centro de salud que la enviará a su laboratorio de referencia.
En caso de que la prueba salga positiva, al titular se le ofrecerá la posibilidad de hacerle una colonoscopia para precisar el estado en el que se encuentra el tumor. Si el test es negativo, se le volverá a repetir la prueba cada dos años hasta que cumpla los 69. El digestólogo José Reyes estimó que con la inclusión de los tres sectores sanitarios ausentes hasta ahora se detectarán 368 cánceres y 1.522 pólipos de alto riesgo cada año.
Otros cribados
Gómez promete seguir con el de sordera infantil
Pese a que en la pandemia se ha dejado de revisar a 25.000 niños de 6 años para prevenir la sordera, la consellera Gómez se comprometió a «no dejar de hacerlo» aunque, dijo, están «evaluando la forma más correcta» de llevarlo a cabo entre la que barajó trasladar el control a las revisiones que se hacen en los centros de salud a los niños de esa edad. No obstante, con la eliminación del programa en su actual formato (sanitarios se desplazan a todos los colegios para realizarlos), se pondría fin a una forma de detección precoz de la sordera infantil en la que Baleares es pionera en todo el país desde hace 35 años.
De otro lado, no pudo especificar cuántas mamografías preventivas se han dejado de hacer por la pandemia en presencia de la coordinadora de la estrategia del cáncer en Balears, Sánchez Contador que advirtió de que habría que pararlo por falta de personal.
