El Colegio de Abogados de Balears, dirigido por su decano Martín Aleñar, quiso ayer rendir un caluroso y justo homenaje a la figura del abogado de oficio. Se trata de una de las labores más valorada del Colegio, ya que un grupo de abogados asiste a los ciudadanos que no tienen dinero para contratar a un letrado que les pueda defender. Un turno de oficio que se presta todos los días del año, las 24 horas del día, no solo en materia penal, sino también en otras jurisdicciones.
Ayer, coincidiendo con el día de la Justicia Gratuita, el Colegio de Abogados quiso reconocer el trabajo de una serie de profesionales que, o bien colaboran de una forma estrecha con el turno de oficio, o se implican directamente en esta atención jurídica.
El decano estuvo acompañado en la tribuna por las abogadas Carmen López y Eva María Cardona, que pertenecen a la junta directiva del Colegio.
Los premiados de este año fueron el comisario de la Comisaría de Eivissa, Manuel Hernández Núñez, y el funcionario de la Abogacía del Estado en Balears, Pedro Vidal Monserrat.
En cuanto a los abogados que desde hace años se dedican y se implican en este servicio de justicia gratuita, el Colegio premió a los letrado Juan Francisco Carrión, Catalina Morro, María Ribas, María Isabel Rosselló y Fernando Carretero, si bien únicamente estuvieron presentes en el acto los tres primeros.
Resaltan la valentía mostrada por los abogados en la primera fase de la pandemia al asistir a los detenidos
Carmen López, que es la coordinadora del turno de oficio en Balears, leyó un manifiesto con motivo de este día especial que se dedica a la justicia gratuita. Señaló la importancia que representa el letrado de oficio en la administración de justicia, ya que es un profesional que facilita que todo ciudadano, con independencia de su capacidad económica, tenga derecho al acceso a los juzgados. Resaltó la dificultad que representa esta labor, dado que muchas veces el abogado conoce a su cliente en circunstancias muy desagradables, y tiene la obligación de actuar de una forma fría y profesional. López resaltó la valentía que han tenido los abogados en la primera fase de la pandemia, donde acudían a asistir a los detenidos sin ningún tipo de protección, todo ello por su interés en defender a los más débiles.
Reforma profunda
La coordinadora señaló que ya va siendo hora de que se afronte una reforma profunda de la ley de justicia gratuita y que es necesario que esta complicada labor profesional cuente con una merecida recompensa económica.
El decano Martín Aleñar calificó a los abogados de oficio de «soldados de la justicia» y resaltó el reto que representa para los letrados afrontar muchas veces algunos casos sin apenas medios, pero con el objetivo de que su cliente cuente con una defensa profesional. Por ello, resaltó la capacidad que muestran estos abogados para encontrar soluciones a situaciones complicadas, por lo que consideró necesario que se premie y se reconozca el «trabajo sereno, comprometido y responsable». Aleñar reivindicó también la valentía que han mostrado los abogados de Balears del turno de oficio, que pusieron en peligro su salud frente a la covid, al asistir a detenidos sin ningún tipo de protección.
