«Las variantes emergentes no son otra cosa que escapes del virus a la vacunación. Estamos en una pandemia mundial en la que tan solo está vacunado el 10,2% de la población mundial y, mientras este porcentaje siga así de bajo, las probabilidades de tener otras variantes emergentes como hasta ahora o que haya que ponerse una tercera dosis de la vacuna o que incluso haya que modificar el fármaco son muy elevadas», defendió ayer Isabel Jimeno, responsable del grupo de vacunas de la Sociedad Española de Médicos Generales y de Familia (SEMG), en el transcurso de su congreso que se clausura mañana, sábado.

Aunque el porvenir está aún plagado de incertezas, la doctora Jimeno opinó que no será necesario vacunarse cada año contra la covid-19 como hacemos con la gripe porque es un virus que «no muta tanto» como el gripal.

No obstante, la experta sí consideró factible que cada dos años tengamos que vacunarnos contra la nueva enfermedad si aún no se ha alcanzado una inmunidad de grupo global y las variantes emergentes siguen escapándose a los efectos de la vacunación.

Ya para concluir, Jimeno defendió el estudio sobre combinación de diferentes vacunas realizado por el Instituto Carlos III con AstraZeneca como mejor manera de sortear futuros desabastecimientos.